El BNG rechaza en el Parlamento gallego las sanciones a Rusia y evita apoyar al Gobierno, la UE y la OTAN en la guerra de Ucrania

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Ana Pontón, en el pleno de esta mañana.
Ana Pontón, en el pleno de esta mañana. XOAN A. SOLER

El PSdeG destaca de nuevo la «situación complicada neste tema» de los nacionalistas, que sí condenan la agresión de Rusia y abogan por intensificar los recursos a los refugiados

25 may 2022 . Actualizado a las 20:00 h.

El conflicto bélico en Ucrania ha vuelto a dejar en evidencia las dificultades de los tres grupos con representación en el Parlamento de Galicia para acordar textos de denuncia y a favor del restablecimiento de la paz en ese territorio, en buena medida por los equilibrios que tiene que hacer el BNG en este asunto.

Tras las dificultades que impidieron hace semanas alcanzar la unanimidad en torno a una declaración institucional, en esta ocasión fue el grupo socialista el que presentó una proposición no de ley con cinco puntos que salió adelante por los votos del PPdeG, pero el consenso volvió a romperse porque el BNG pidió una votación parcial. Dio el sí al punto número uno, que condena «enerxicamente a agresión de Rusia a Ucraína»; y al último, en el que se insta a la Xunta a realizar «todos os esforzos necesarios» para movilizar recursos a favor de la acogida de refugiados derivados de esa guerra.

Sin embargo, los nacionalistas se desmarcaron de los puntos dos, tres y cuatro, en los que se insta a la Cámara a expresar su apoyo a la labor del Gobierno de España y la UE en el conflicto; a las Fuerzas Armadas de España y de la OTAN; y a la política de sanciones que está aplicando Bruselas.  

En su exposición, el portavoz socialista explicó que la proposición «non vai contra o BNG, senón que defende a Ucraína», pero no perdió oportunidad para poner el foco sobre las excepciones planteadas por los nacionalistas: «Que vostedes teñan unha situación complicada neste tema é un problema seu, non de quen defende a ese país», dijo Luís Álvarez, quien lamentó que una vez más la Cámara gallega no ofrezca «o máis firme compromiso coa defensa dos principios da democracia». 

Paula Prado, la portavoz suplente del PPdeG, transmitió desde la tribuna el apoyo de su grupo a la proposición socialista, aunque hizo algunas apreciaciones de forma, para dirigir sus más duros ataques a la bancada del BNG, a cuyos diputados acusó de mantener un «alma soviética» y de atacar el «imperialismo» americano sin denunciar la estrategia de Vladimir Putin. En este punto, e incidiendo en el posicionamiento mantenido por los nacionalistas, la también secretaria general de los populares gallegos lanzó un dardo a Ana Pontón, a la que denominó «lideresa» del grupo parlamentario, pero no del BNG, «onde manda Néstor Rego», diputado en el Congreso al que le reprochó su actitud durante el discurso en Cortes del presidente de Ucrania al no levantarse para aplaudir su intervención.

Olalla Rodil remarcó en su intervención la oposición del BNG a cualquier tipo de guerra, haciendo mención a anteriores conflictos y reclamando también a los otros grupos que denunciasen la situación del pueblo palestino y del saharaui. La nacionalista volvió a lamentar que tanto el PP como el PSdeG estén utilizando «a dor dos ucraínos» para confrontar con el Bloque, y fue especialmente incisiva con los socialistas por sumarse al «argumentario e a estratexia» popular. Rodil puso por delante el carácter pacifista de su formación y explicó su rechazo parcial a la propuesta por estar en contra de la escalada militar y el suministro y venta de armas de guerra.