Así lo afirma «Der Spiegel» en función de una correos electrónicos a los que ha tenido acceso este medio alemán
04 feb 2017 . Actualizado a las 15:43 h.El exfutbolista británico David Beckham actuó como embajador de Unicef y colaboró con otras organizaciones benéficas con el mero propósito de obtener el título de caballero británico, según unos correos electrónicos a los que ha tenido acceso Der Spiegel.
El semanario alemán, junto a otros medios europeos con los que colaboró en la difusión de «Football Leaks», denuncia que «los documentos destapan la marca (Beckham) como una máscara» con la que el exjugador del Real Madrid y el Manchester United trataba exclusivamente de «maximizar beneficios».
Der Spiegel asegura que para el exinternacional británico se convirtió en una «obsesión» alcanzar el título de caballero, algo que se le resistió durante algunas convocatorias anuales, provocándole gran enojo, según trasciende de los documentos filtrados.
En un correo electrónico, su representante, Simon Oliveira, le explica al futbolista que «para ser nombrado caballero» era necesario implicarse más con Unicef y en otro mensaje, que «Unicef es decisiva para la marca» Beckham.
Su apoyo a estas buenas causas le daba un «halo» al exfutbolista que favorecía su objetivo inconfesable, señala otro escrito.
Su apoyo a la campaña por la permanencia de Escocia en Reino Unido, a juzgar por el intercambio de mensajes revelado, debe entenderse también como un intento de lograr el reconocimiento por parte de las altas instancias que luego decidían el reparto de títulos.
La revista alemana cita textualmente documentos que evidencian que el exjugador recelaba de implicarse con Unicef cuando eso le costaba tiempo, esfuerzo y dinero.
De hecho, según los correos, Beckham rechazó inicialmente aportar dinero propio a un fondo de Unicef que él representaba -y que al presentarlo llamó su «primera prioridad»- y sólo se decidió a aportar algo después de que su representante le presionara por los problemas que esto le estaba ocasionando con la organización y los perniciosos efectos que eso podía tener a su imagen.
Además, el exfutbolista reclamó a Unicef el pago de 6.685 libras (7.700 euros) por un viaje en primera clase en un vuelo internacional, cuando se le había ofrecido un jet privado para ese viaje.
En 2015, por su parte, Beckham rechazó acudir en España a la entrega de un premio para el que había sido nominado con estas palabras: «Si no se trata del título de caballero, olvídalo».