Javier Tebas: «El modelo del Celta es el que queremos para el fútbol español»

GRADA DE RÍO

El dirigente de la LFP cree que Mouriño se merece que le vaya bien deportivamente
12 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Tebas está muy al tanto de cuanto sucede en todos los clubes de la LFP. Y de forma especial a los dos grandes del fútbol gallego, Dépor y Celta, para cuyos dirigentes tiene palabras de elogio y también de aliento. En el caso de los coruñeses, quienes atraviesan por serias dificultades deportivas y sociales, califica de valiente a Tino Fernández. Mientras, asegura que el Celta de Mouriño es el ejemplo a seguir en la Liga.
-¿Cómo valora la gestión de Mouriño en el Celta?
-Deportivamente muy bien y además es de los clubes que se encuentran en mejor situación económica en España. Pienso que Carlos Mouriño ha puesto mucho dinero de su bolsillo y se merece que deportivamente le vaya bien. El modelo del Celta es el que queremos para el fútbol profesional español. Sin miedo a un descenso porque tiene buena estabilidad económica, con proyectos de campos modernos. Hablamos de que la gestión del Celta es a lo que debe aspirar el fútbol profesional. Galicia tiene suerte con los gestores de sus dos clubes de Primera División.
-¿Qué diría a grupos como Riazor Blues, que está presionando al presidente del Dépor, al tiempo que enarbola una bandera victimista?
-Yo le diría que se suba al carro del siglo XXI, que su forma de animar es vieja y casposa, que ya no se anima insultando al contrario, con esa forma de semiviolencia. Hay formas preciosas de animar a tu equipo y de salir adelante. También diría a Riazor Blues que lo que tienen que hacer es cumplir la Ley, como todos. A mí hay normas que no me gustan, y las tengo que cumplir. Y hay una que dice que se deben inscribir en el libro de registro y que si quieren meter los bombos tienen que responsabilizarse.
-¿Las normas que han impuesto no son un poco excesivas?
-No. Hay una norma del 2007, que posiblemente si la hubiésemos cumplido nos hubiésemos evitado incluso la muerte de Jimmy. Entonces, hay que cumplir las normas. Y las peñas se tienen que inscribir en un libro de registro y Riazor Blues no se inscribe. La ley del 2007 fue aprobada por el parlamento español, no por Javier Tebas. Yo lo que hago es cumplir una norma en la que antes fuimos muy laxos. Que se apunten a esa norma y a la animación del Siglo XXI, no a esa forma casposa del insulto.
-¿Habla usted mucho con Tino Fernández?
-Sí, hablo con Tino.
-Sufrió un chantaje tremendo en un momento dado y lo sigue sufriendo, agravado con una situación de debilidad deportiva.
-A Tino, primero lo considero valiente. Porque en las circunstancias que ha tenido que vivir ese club, estar al frente es para que lo considere un valiente, a él y a su gente.
-¿Valientes o temerarios?
-No, valientes. Son hombres de valores y convicciones con objetivos claros. Le diría a Tino que tiene que seguir adelante por el bien del Deportivo y por el bien del fútbol español. Personas como ellos deben seguir al frente de estos barcos porque son un ejemplo de lo que queremos del fútbol profesional. Es cierto que sufren, pero que sepan que la meta final será muy agradable cuando todos puedan disfrutar de un equipo sin violencia y saneado económicamente.
-Salvo que descienda
-Creo que si tiene la mala suerte de descender, con su convenio y con la venta centralizada, no hay que alarmarse. Podría aguantar.
-Se dice que en su día su intervención ayudó a la continuidad y salvación del Deportivo, eso sí, en una historia un tanto oscura y no explicada.
-No hago las cosas para que me den abrazos. Las hago porque actúo en conciencia. Yo me defino como políticamente incorrecto. Intervine en que el Deportivo pudiera vivir y continuar. Y estoy contento por ello. Lo volvería a hacer si fuese necesario. Lo de los ultras y los Riazor Blues son gajes del oficio. Sobran en el fútbol. O se reconvierten, que será difícil, o se tendrán que ir del fútbol.
«Queremos que se aclaren las cuentas de la Federación»
-¿Va a denunciar las cuentas de la Federación?
-Estamos preocupados por su informe de auditoría. Las salvedades del informe, las pegas que ponen al contrato de Santa Mónica, los problemas con subvenciones, como Federación que somos me preocupan. ¿Llegaremos a denunciar? Lo que queremos es aclarar las cuentas. No podemos ser como Bankia y en unos años encontrarnos en los tribunales. Oiga, nuestro deber de diligencia y con el fútbol español y la sociedad es aclarar las cosas. No puedo ser presidente de la Liga, de la federación y que haya auditorías con problemas y mirar para otro lado, entonces tengo que desaparecer o cambiar de sector.
-¿Qué es eso de Santa Mónica?
-Hay una rescisión que merece una explicación. Aquí en la Liga damos explicaciones de todo. El día que explicamos las cuentas nos tiramos seis horas explicándolas. Hay que ser transparentes.
-¿Qué dice sobre esa amenaza de la FIFA de expulsar a España?
-Hemos llegado a una FIFA que comienza a meterse hasta en la gestión económica de los clubes. No puede ser. No tengo miedo a la FIFA. En la UE no es creíble. Y si cumple su amenaza, el fútbol profesional español deberá reaccionar. Y por suerte, hay mecanismos legales para intervenir. Lo que han hecho se llama coacción. Cuando en un país se cumple el estado de derecho, cuando esas leyes fueron aprobadas por su parlamento, eso no puede ser puesto en duda por una decisión de una entidad privada que está en Suiza. La FIFA no es otro estado. Cada uno tiene que tener sus competencias.
«Dije a mi equipo de dirección: ?Vamos a regenerar el fútbol profesional?»
-¿De qué está usted más orgulloso, del control económico, de la lucha contra la violencia, de la lucha contra los amaños...?
-Estoy muy orgulloso del equipo que hemos podido hacer y la capacidad que hemos tenido todos de poner esos temas a la vez. A mi me daba vértigo. ¿Seremos capaces de hacer tanto? Era necesario. Las ideas clave eran dos. Dije a mi equipo de dirección: «Vamos regenerar el fútbol profesional». Hablaba de una regeneración de valores. Ahí está el control económico, no se puede hacer cualquier cosa para conseguir los objetivos a nivel económico. Y ahí está la integridad: no vale todo para conseguir los objetivos deportivos. Y luego está la creación de valor, que ha venido por la internacionalización del producto, que también es un proceso complicado, pero que estamos llevando adelante. Elegí un equipo nuevo, incluso de fuera del mundo del fútbol, con una gran ilusión. Eso nos permitió ponerlo en marcha y obtener ya resultados. El control económico ha permitido una disminución importantísima de la deuda. Y en la integridad ya salieron los primeros casos.
-En realidad, cuando usted empezó a hablar de que en España se amañaron partidos, parecía que usted estaba manchando su propia competición.
-Aprendí mucho de lo que ha pasado en el ciclismo con el dopaje. Estaba el dopaje, la gente se callaba, no pasaba nada y cuando estalló se manchó el ciclismo y la gran figura que era Armstrong se encontró con demandas que le pueden hacer devolver grandes sumas de dinero. Viendo eso, uno cuando sabe que ocurrían estas cosas, tiene que atajarlas. Porque la forma de convencer a los patrocinadores es que la Liga lucha por la limpieza. Que no me vengan dentro de diez años diciéndonos que les vendimos una cosa que no era verdad. No era creíble que España fuese el convento de Europa en el mundo de la integridad.
-Teme que a pesar de todo, alguien vuelva a intentar un amaño al final de esta Liga.
-No lo sé. Como en cualquier ámbito de la sociedad. Hay personas que roban bancos, gasolineras, que atracan a abuelas...
-Su nombre suena en los campos de fútbol, sobre todo en los grupos ultras.
-El famoso «Tebas vete ya», sí. A raíz del asesinato de Jimmy, todo aquello sabíamos que no sería fácil, pero decidimos que teníamos que seguir adelante. Yo dentro de dos años valoraré entonces que si el «Tebas Vete ya «es unánime, pues... Pero voy a lo positivo. Siguen siendo normalmente los ultras los que cantan esa canción, pero hay un dato claro, se insulta menos en los campos. Y eso es lo realmente importante y el objetivo que estábamos buscando.