
Las peñas celtista y madridista porriñesas viven la previa entre piques y bromas
23 oct 2015 . Actualizado a las 12:28 h.Sus negocios están a 50 metros de distancia, pero sus preferencias futbolísticas se encuentran a años luz. Javier Bastos y Benjamín Martínez, pertenecientes a las peñas celtista (Os Zoqueiros) y madridista de O Porriño, respectivamente, son un ejemplo de lo que en esta semana previa al partido entre ambos equipos (mañana, 16.00 horas) se ha vivido en más de un municipio gallego. «Algún pique que otro sí que ha habido», confiesan ambos, cuyos colectivos hacen gala de una gran relación.
«Yo creo que los celtistas están un poco creciditos con este inicio y sí que hay las típicas bromas de que nos van a meter tres o cuatro. ¡Pero eso habrá que verlo!», advierte Martínez. Bastos le replica que la humildad es una señal de identidad de los aficionados al equipo vigués. «Sabemos que no tenemos ni la mitad de presupuesto que ellos, que su jugador más caro igual costó cien millones y el nuestro, cinco. Pero también que llegamos muy bien y tenemos posibilidades de ganar el partido».
Los madridistas tampoco niegan ese extremo. Al contrario, ven al Celta con opciones. «Hace un fútbol espectacular, aparte de que Balaídos siempre ha sido un campo difícil para nosotros y que va a estar a rebosar», dice el también integrante de la Peña Madridista Nacho Rodríguez. Martínez le secunda y recuerda que «ya ganaron ante equipos muy complicados y eso no es fruto de la casualidad».
Para José Giráldez, de Os Zoqueiros, «la comparación entre el Madrid y el Celta es como entre el AVE y el cercanías o un Mercedes y un utilitario», por eso firmaría el empate aun sabiendo que las fuerzas en este inicio de liga, al menos según dicta la clasificación, están parejas. «Tengo 44 años y recuerdos de Balaídos desde hace 38. He visto muchas derrotas en estos partidos, pero también mucha ilusión siempre por poder ganarlos».
Esa ilusión es común a las dos aficiones, que esperan que un partido vibrante con el que todos puedan disfrutar. «Estamos nerviosos, con una sensación que no había contra el Barça, quizás porque entonces se tenía claro que no era nuestra liga y ahora vemos que pasadas unas jornadas más seguimos ahí arriba», analiza Javier. Los aficionados merengues tampoco obvian el gran momento vigués. «Están jugando muy bien y tienen a Nolito, que ahora mismo parece Dios. Nosotros estamos un poco en horas bajas y no podemos esperar atrás porque coge un balón y lo mete», advierte Martínez.
Los elogios también se dan en la dirección contraria. «Ellos tienen una plantilla que aunque salga el suplente no se nota la diferencia», aprecia Giráldez. Y añade que la propuesta del conjunto de Berizzo puede llegar a ser «un poco suicida, al mismo tiempo que atrevida y bonita de ver para el espectador», lo que convierte al duelo en «impredecible» en cierta media. En ese sentido, Bastos augura «un monólogo del Celta en cuanto a la posesión y un Madrid que puede hacer daño a la contra».
Todos coinciden en calificar la clasificación como anecdótica porque «lo importante es cómo acaba», según Rodríguez. Pero también comparten la idea de que el Madrid se va a tomar al Celta muy en serio después de todos los avisos que han dado los de Berizzo en las ocho primeras jornadas. Así, los merengues reconocen «algo de miedo» y los celtistas «máxima ilusión», papeles intercambiados con respecto a otras ocasiones y ante un duelo en lo alto como pocas veces había visto Balaídos.
«Hay cierta simpatía hacia el Celta, pero queremos ganar»
Benjamín Martínez reconoce «cierta simpatía» por el Celta aunque solo sea por la cercanía. Pero tanto él como Nacho Rodríguez y el resto de los integrantes de la peña se definen como «madridistas al 100 %». Algunos podrían dar por buena una derrota que supusiera perder la liga y una salvación del Celta. Pero otros ni eso. Y en las actuales circunstancias, nada que no sea sumar tres puntos les contentaría.
«El Madrid es favorito por nombre y por escudo, eso está claro. Aunque tal y como están las cosas, diría que las opciones están quizás al 50 %», comenta Martínez. Augura que «tarde o temprano el Celta va a pinchar» y considera que la actual tabla clasificatoria no va a ser muy parecida en lo que a los vigueses se refiere -«aunque ojalá me equivoque», matiza-.
Nacho Rodríguez coincide en que «favorito es el Madrid allá donde vaya» y, pese a la proximidad y a que el Celta sea un equipo de la tierra, le «duele lo mismo perder contra ellos o contra el que sea». «Podríamos decir que el empate es lo mejor para todos, pero siendo sincero, lo que quiero es un partido vibrante... Y que lo ganemos».
«Hemos demostrado que podemos plantarles cara»
Para los celtistas porriñeses el choque de mañana no es uno más en cuanto a la entidad del conjunto que estará enfrente, pero sí en lo que se refiere a estar al lado de los suyos. «Con los madridistas tenemos una relación muy buena, pero ellos no entienden nuestro sentimiento, tienen una perspectiva muy diferente», expresa Giráldez. Y lo justifica diciendo que, mientras el próximo rival está acostumbrado a ganar, los celtistas fieles «estaban entre los 6.000 sufridores de Segunda».
Así, admiten que las fuerzas igualadas con las que llegan los equipos a este compromiso es algo en cierta medida novedoso. Pero no casual, razona Bastos: «Hemos demostrado que podemos plantar cara a cualquiera y llegamos con la moral muy alta. Mi pronóstico es que ganaremos, pero no creo que se consiga de una manera tan holgada como contra el Barça».
Pase lo que pase en el partido, están orgullosos de la haber escogido la opción celeste. «Ser del Madrid o del Barça es lo más fácil. Yo luché para que mis hijos fueran celtistas pese a los medios y todo lo que nos rodea tira hacia los grandes», lamenta Giráldez. Hoy, en su familia, el Celta es «como una religión». Gane o pierda.