El técnico del Celta hace autocrítica, pero asegura que los últimos tropiezos no afectan al ánimo del equipo
19 feb 2017 . Actualizado a las 16:58 h.Berizzo ha asegurado esta mañana que el Celta va a salir a ganar este domingo (18.30 horas) ante Osasuna, destacando que el equipo navarro es más peligroso de lo que pueda parecer. «Es un rival que ha reaccionado, ha hecho buenos partidos y nos va a exigir un ejercicio de ataque continuo. La idea es salir a ganar, tener el balón con ritmo. Debemos tener oportunidades más claras y acertar», señaló en referencia a lo sucedido el jueves frente al Shakhtar.
La autocrítica y el estado del campo fueron dos de los temas que abordó el técnico del Celta. «Hay que reconocer qué sucede en los partidos. Solo jugamos mal ante el Alavés», comentó repasando el último mes de competición. Quiso poner de manifiesto, asimismo, que el jueves lograron «sujetar a uno de los mejores ataques del mundo», pero sin lograr convertir las ocasiones de la que dispusieron. El resultado no les afecta anímicamente: «No mina nuestra moral. La preocupación tiene que ver con la puntería. Hay que serenarse para aprovechar las oportunidades». Y admitió que se les han escapado puntos en la recta final, pero que han «ganado y perdido los mismos» en esos últimos minutos.
«El campo es inestable, obliga a un toque más y ralentiza el juego», comentó sobre el estado del terreno de juego, profundizando en las quejas de Hugo Mallo, Tucu Hernández y Daniel Wass en las últimas horas. «Tiene una humedad subterránea difícil de controlar. Está blando e inestable», analizó el Toto. a su juicio, la solución a estos problemas no pasa por un nuevo cambio un año después de haber sustituido el anterior tapete. Estas circunstancias «obligan a un fútbol más lento, porque te puedes equivocar más fácil».