«Gran Hermano 14», final: Igor, el vasco que revolucionó Guadalix

La Voz REDACCIÓN

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El concursante ha tenido polémicas con casi todos los concursantes, las más recordadas, con Miriam, Sonia y Desi

18 jun 2013 . Actualizado a las 21:28 h.

Igor Basurko entró en la casa de Gran Hermano 14 el doce de febrero, en la primera remesa de concursantes que llegó a Guadalix. Este vasco se presentaba como un mujeriego y separado padre de un hijo de dos años. Además era jugador profesional de hockey sobre patines en Francia.

Desde un principio se perfiló como uno de los estrategas de esta edición e hizo muy buenas migas con Argi. Pero su peligroso acercamiento a Miriam, la superviviente del Costa Concordia que estaba a punto de casarse, lo colocó entre algunos de los más criticados desde fuera de la casa. Los escarceos de la pareja y sus edredonings y estriptís varios, provocaron que el novio de Miriam, Miguel, cancelase la boda sin que ella lo supiese. Mientras Igor, proclamaba su intención de volver con su ex pareja, Ainara. Fue precisamente una llamada del exterior, que Igor eligió realizar a la madre de su hijo, la que le hizo hacerse una idea de cómo se estaban viendo las cosas en el exterior de Gran Hermano 14. Eso y, la conversación de Miriam primero con su madre y luego con Miguel (que le comunicó que no había boda), precipitó los acontecimientos. Tras unas reñidas nominaciones, Miriam fue la primera en abandonar la casa de Guadalix. Fuera tuvo que ver en imágenes los hechos que dentro negaba y se despidió del que hasta el momento había sido su mayor apoyo con cierta frialdad, dejando a Igor hundido.

Una semana después Igor era expulsado por la audiencia, y se enfrentaba fuera también a la dura realidad. La relación tan estrecha que habían tenido en la casa, se enfrió totalmente cuando abandonaron las cuatro paredes de Gran Hermano 14 y se convirtieron en enemigos. Igor también admitió que uno de los motivos que deterioró su relación con Ainara fue su ludopatía, que ya ha superado.

Esa enemistad se recrudeció con la repesca. Igor, entraba en la casa para ajustar cuentas con Sonia y con los gemelos, Carlos y Gonzalo, por algunos de los comentarios que había visto fuera. La audiencia eligió al vasco como candidato a volver a Gran Hermano 14, y los todavía concursantes de la casa optaron por Miriam, que junto a Juan Carlos y Giuls, compartieron una semana en el apartamento contiguo. La organización preparó una serie de tiempo que los candidatos a la repesca compartirían con los concursantes, pero finalmente Gran Hermano redujo ese tiempo por la excesiva información que Miriam dio en la casa del exterior. Y sobretodo, Miriam provocó un auténtico tsunami cuando advirtió a Sonia de las «malas intenciones» de Igor hacia ella.

Pese a todo, la audiencia decidió finalmente meter a Igor en la casa, lo que hizo que Sonia que pasase por sus peores momentos en la casa, y tras una semana nominada, fue expulsada por el público.

Igor no fue tan duro como prometía en la repesca, y aunque tuvo algunos enfrentamientos con Desi, por la poca disciplina de la sevillana, consiguió no salir nominado y hacerse con un hueco en la final. No es la primera vez que un repescado se cuela entre los finalistas, precisamente fue una gallega, Pilarita, la que quedó en tercer puesto después de estar varias semanas fuera de la casa en la undécima edición de Gran Hermano.