Nelson Mandela: Obama dice que hay líderes solidarios con Mandela pero que «no liberan a sus pueblos»

La Voz AGENCIAS

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Miles de personas llenan ya el estadio
Miles de personas llenan ya el estadio KIM LUDBROOK

Durante el funeral, Barack Obama y Raúl Castro han protagonizado un saludo histórico. El presidente estadounidense y su homólogo cubano se han estrechado las manos cuando el primero se dirigía hacia el estrado del estadio

11 dic 2013 . Actualizado a las 09:31 h.

El presidente estadounidense, Barack Obama, ha comparado este martes al expresidente y premio Nobel de la Paz Nelson Mandela con Mahatma Ghandi, Martin Luther King y Abraham Lincoln, al tiempo que ha destacado que hay «muchos líderes internacionales» que han mostrado su solidaridad por el fallecimiento de 'Madiba' pero «no liberan a sus propios pueblos».

En su discurso durante el funeral por Nelson Mandela celebrado este martes en el estadio Soccer City de Johannesburgo, Obama ha presentado a Mandela como «el último gran liberador del siglo XX» y ha asegurado que ha sido «un gigante de la historia» que ha movido a una nación «hacia la justicia» y ha influido «a millones de personas en todo el mundo».

Obama, que ha sido uno de los mandatarios más aclamados en el estadio, ha transmitido sus condolencias a la familia de Nelson Mandela y ha agradecido al pueblo de Sudáfrica que haya «compartido» a 'Madiba' con el resto del mundo.

Barack Obama ha protagonizado una imagen histórica al saludar al presidente de Cuba, Raúl Castro, con un apretón de manos cuando se dirigía hacia el estrado del estadio. Esta es la primera ocasión en la que ambos mandatarios se saludan públicamente.

Por su parte, Raúl Castro ensalzó a Nelson Mandela como «un ejemplo insuperable para América Latina y el Caribe», que a su juicio «avanzan hacia la unidad y la integración». Mandela fue «símbolo supremo» de la «lucha revolucionaria» y un «profeta de la unidad y de la reconciliación», que supo dirigir a su pueblo «en la batalla contra el 'apartheid' y en el camino hacia una nueva nación», añadió Castro. Gracias a él, Sudáfrica «superó la esclavitud y la segregación racial», aseguró.

Oración interreligiosa

La ceremonia, a la que han asistido un centenar de jefes de Estado, empezó con el himno nacional de Sudáfrica y con una oración «interreligiosa» de diferentes credos, tal y como dejó escrito en sus últimos deseos el expresidente de Sudáfrica. El púlpito de oración fue ocupado sucesivamente por representantes de las religiones judía, hindú, musulmana y cristiana, a los que las decenas de miles de personas que llenan el estadio FNB de Johannesburgo han escuchado con respeto. Después, se entonó una oración por el alma de Mandela a la que el público respondió con cánticos y palmas en un momento de fuerte emotividad.

Tras la oración comenzaron los discursos de familiares y líderes políticos mundiales. El secretario general de la ONU, Ban Kin-moon, calificó a Nelson Mandela como uno de los grandes ejemplos de la Historia, durante el servicio religioso oficial en memoria del expresidente sudafricano que se celebra en el estadio FNB de Soweto, en Johannesburgo. «Fue más que un gran líder de su país. Fue una de las grandes enseñanzas de la Historia, alguien que predicó con su ejemplo» , dijo Ban Kin Moon durante su intervención.

Andile Mandela, nieto del expresidente sudafricano Nelson Mandela, recordó hoy a su abuelo como un «árbol gigante» que ha caído «esparciendo mil hojas brillantes», e instó a los ciudadanos a seguir sus pasos. Madiba, como es conocido Mandela en su país, es «un espejo que refleja la gloria y el esplendor de la mente y el corazón», dijo su nieto.

Abrazo entre Winnie Mandela y Graça Machel

Winnie Mandela, la segunda mujer del expresidente sudafricano, y su viuda, Graça Machel, se fundieron en un afectuoso abrazo y se besaron ante los miles de sudafricanos que abarrotaban el estadio. Dos de las mujeres más importantes de la vida de Nelson Mandela se saludaron así al coincidir en una de las gradas del estadio que ha acogido la ceremonia religiosa. Ambas de luto y muy emocionadas quisieron hacer visible así el afecto que comparten por el icono de la lucha contra el «apartheid», mientras miles de asistentes celebraban el gesto.

El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, fue abucheado al llegar al estadio y encajó con gesto contrariado los silbidos y abucheos que le propinaron desde las gradas. Mientras, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, fue ovacionado, y el ex primer ministro británico John Major, ha asegurado que el Reino Unido estuvo en el lado equivocado de la historia cuando Sudáfrica permanecía bajo el régimen del «apartheid», contra el que Nelson Mandela luchó hasta lograr su eliminación.

Entre los asistentes también se encuentran famosos como el cantante y líder de U2, Bono, o la oscarizada actriz Charlize Theron.

Colas para entrar en el estadio

Las puertas del estadio se abrieron a las 06.30 hora local, aunque un grupo de ciudadanos hacía ya cola desde una hora y media antes desafiando a la lluvia y cantando «Bula, bula, bula!» («Abrid, abrid, abrid!»). «No hay mejor manera de honrar a Tata (padre, como llaman los sudafricanos a Mandela). Él fue un gran hombre», dijo Emely Mirake, de Pretoria, citada por la agencia local Sapa. Miles de personas cantan y bailan desde hace horas desafiando a la lluvia y al mal tiempo en Johannesburgo.

Además de encontrarse en el antiguo gueto negro de Soweto, donde Nelson Mandela vivió durante años, el estadio fue escenario en 1990 de uno de los primeros discursos pronunciados después de salir de la cárcel por el que fuera el preso político más famoso del mundo.

El campo, de más de 90.000 localidades, fue escenario de la final del Mundial de fútbol de Sudáfrica, disputada el 11 de julio de 2010 y en la que España derrotó a Holanda (1-0) y se proclamó campeona del mundo.

Pero la ceremonia tendrá también eco fuera del FNB, a través de las cerca de cien pantallas que lo retransmitirán en espacios públicos de todo el país y en otros tres estadios de Johannesburgo.

Capilla ardiente en Pretoria

Los actos de despedida de Nelson Mandela continuarán del miércoles al viernes en Pretoria, por cuyas calles desfilará el féretro del expresidente durante esos días. También en la capital, en la sede del Gobierno y en esas mismas jornadas, estará instalada la capilla ardiente.

El funeral de Estado tendrá lugar el próximo domingo en la localidad de Qunu, en el sureste de Sudáfrica, donde creció Mandela y había pedido ser enterrado.

El Gobierno de Sudáfrica recomendó ayer a los jefes de Estado o de Gobierno que están en el país para homenajear a Mandela que no acudan al entierro en la pequeña aldea de Mandela, debido a la falta de infraestructura.