El prorruso Serguéi Aksiónov, jefe del Gobierno y comandante en jefe de las recién formadas tropas de Crimea, ha pasado en menos de una semana de ser diputado local de una formación marginal a convertirse en el hombre fuerte de la península. Rusia confía en él para hacer de Crimea un Estado marioneta que dirigirá Putin desde el Kremlin, como ya sucede con las provincias georgianas de Abjasia y Osetia del Sur.
Aksiónov fue elegido diputado de la Rada de Crimea en 2010, como cabeza de lista de Unidad Rusa, formación que obtuvo el 4% de los sufragios. Si eso hubiese pasado en Rusia, cuyas leyes exigen obtener por lo menos el 5% para acceder al reparto de escaños, hubiese sido extraparlamentario.
Pero, el pasado 27 de febrero, un grupo de hombres armados no identificados tomaron el edificio de la Rada crimeana en Simferópol. Después, obligaron a los diputados a destituir al entonces primer ministro, Anatoli Mogiliov y nombrar en su lugar a Aksiónov. El depuesto Yanukóvich, a quien Moscú considera el poder legítimo, dio el visto bueno a la designación. Al día siguiente el flamante jefe de Crimea envió a Putin un mensaje pidiéndole ayuda para «proteger» a la población rusa y «restablecer el orden». Lo cierto es que fue Aksiónov y los pistoleros a su servicio quienes trastocaron la legalidad vigente en la península.
La solicitud de ayuda llegada desde Simferópol sirvió a Putin para pedir al Consejo de la Federación permiso para invadir Ucrania. El domingo, la Rada de Crimea decidió crear su propio ejército a partir de los desertores ucranianos, de los disueltos antidisturbios y los también desmantelados grupos especiales del Servicio de Seguridad de Ucrania. El comandante en jefe de esas «fuerzas armadas» es Aksiónov, quien ha llamado a las regiones del Este de Ucrania que lo deseen a incorporarse como parte de un gran Estado con Crimea como centro.
El nuevo «gobernador» de Crimea ha advertido a los militares ucranianos que no depongan las armas que serán castigados con extrema dureza. El 1 de marzo, el presidente en funciones de Ucrania, Alexánder Turchínov, firmó un decreto declarando ilegal su nombramiento Sin embargo, Putin reconoció el martes su autoridad.
El nuevo zar de Crimea nació en 1972 en Beltsi (Moldavia). Estudió en la escuela militar de armamento y construcción de Simferópol. Creó varias empresas de dudosa reputación y, en 2010, se metió en política creando el partido Unidad Rusa. Es actualmente presidente de la Federación de Crimea de lucha grecorromana. En 2009, el entonces vicepresidente de la Rada Mijaíl Bajariov, le acusó de haber pertenecido al crimen organizado en los años 90.