Oscar Pistorius no presenta signos de ser una persona violenta

La Voz AGENCIAS

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Pistorius durante su juicio en Pretoria
Pistorius durante su juicio en Pretoria GIANLUIGI GUERCIA / POOL

Según los informes psiquiátricos, el atleta tiene tendencias suicidas desde que mató a su novia

02 jul 2014 . Actualizado a las 18:59 h.

Oscar Pistorius, que está siendo juzgado por el asesinato de su novia, no presenta signos de ser una persona violenta ni abusiva en sus relaciones personales, según los informes psiquiátricos a los que fue sometido durante 30 días. «No se encontraron pruebas que indiquen que el señor Pistorius tenga un historial de agresiones anormales o violencia explosiva», recoge uno de los documentos leído por la defensa en la vista celebrada este miércoles en el Tribunal Superior de Pretoria.

«El deportista no presenta características de personalidad de narcisismo o psicopatía, asociadas generalmente a hombres con relaciones abusivas y que se han relacionado con asesinatos», añade la parte del informe conocido este miércoles. Sin embargo, según extractos de los documentos leídos este miércoles por el abogado de la defensa, Barry Roux, Pistorius sufre estrés postraumático desde el crimen, y solo el tratamiento que recibe evita que corra riesgo de suicidarse. «El velocista fue gravemente traumatizado por los acontecimientos del 14 de febrero de 2013 y actualmente, sin tratamiento médico apropiado, su estado podría agravarse y aumentaría el riesgo de suicidio», indica el informe citado por el abogado. El año pasado, un mes después de la muerte de Reeva Steenkamp, la familia del deportista desmintió formalmente que tuviera tendencias suicidas, después de las declaraciones a la BBC de uno de sus amigos, el criador de caballos Mike Azzie.

Esta parte de los informes se conoce días después de que el fiscal de la causa, Gerrie Nel, subrayara que los exámenes del deportista revelan que no sufría ninguna perturbación mental en el momento de tirotear su novia, la modelo Reeva Steenkamp, al confundirla con un ladrón, según la versión del acusado. A través de testimonios de antiguos amigos y una exnovia de Pistorius, y de otros materiales utilizados en sus interrogatorios, el fiscal había insistido en presentar al acusado como una persona violenta, narcisista y agresiva. Como ya adelantó Nel el lunes, los informes -ordenados por la jueza para determinar si el atleta sufre un trastorno de ansiedad que pudiera haberle influido en el momento del crimen- descartan que sufriera alguna perturbación mental que rebaje su responsabilidad criminal en los hechos.

Pistorius, una persona sensible al miedo

El juicio a Pistorius comenzó el 3 de marzo en el Tribunal Superior de Pretoria, y se acerca a su final después de que la defensa llamara durante esta jornada a declarar a su último testigo. El día después de que su representante asegurara que el atleta estaba obsesionado por la seguridad, el profesor Wayne Derman, especialista en medicina deportiva que ha trabajado con Pistorius durante seis años, destacó que la discapacidad del deportista -que tiene las dos piernas amputadas por un problema genético- le convierten en una persona extremadamente sensible al miedo y que vive en permanente ansiedad. Derman continuará declarando mañana, y se enfrentará después al interrogatorio del fiscal. La defensa esgrime las circunstancias detalladas por este profesor para explicar el comportamiento del velocista la noche del crimen.

Pistorius ha reconocido haber disparado y matado a su pareja a través de la puerta del baño de su casa de Pretoria la madrugada del 14 de febrero del año pasado. El corredor asegura haber abierto fuego por accidente y presa del pánico, sin saber que era Steenkamp quien se encontraba en el retrete, y convencido de que un intruso se había colado por la ventana del baño.

Por su parte, Nel le acusa de matar intencionadamente a su novia, después de una supuesta discusión que dicen haber escuchado varios vecinos llamados a declarar por la Fiscalía. De ser hallado culpable de este cargo, Pistorius se enfrentaría a una pena de cadena perpetua.