Una prima de Reeva Steenkamp ha recordado el devastador efecto que tuvo la muerte de la modelo en su familia. Por su parte, el fiscal sigue reclamando una dura condena para el atleta
15 oct 2014 . Actualizado a las 19:23 h.Las lágrimas han regresado a la sala del caso de Oscar Pistorius. Una prima de Reeva Steenkamp recordó este miércoles ante el Tribunal Superior de Pretoria el devastador efecto que tuvo la muerte de la modelo sobre su familia, a quien siempre sirvió de apoyo sentimental y económico. «Les cuidaba extremadamente bien. No solo económicamente. No sé cómo han podido resistir la pérdida», explicó Kim Martin, prima hermana de Steenkamp, que subió al estrado como primera testigo del fiscal Gerrie Nel en la vista que se celebra desde el pasado lunes para imponer una pena al corredor, declarado culpable de homicidio involuntario.
La testigo repasó la historia laboral del padre de Reeva, Barry Steenkamp, que fracasó como entrenador de caballos de carreras y en otros negocios relacionados con la hípica. Reeva -descrita por Kim Martin como una persona «extremadamente trabajadora» que se mudó a Johannesburgo para prosperar y ayudar a la familia- les apoyó en todo momento, y cada año pasaba al menos un mes con sus padres en la ciudad de Port Elizabeth, en la costa este sudafricana, donde viven. La prima aseguró ser «la voz de Reeva», y explicó que aceptó declarar porque el delicado estado anímico de los padres de la víctima les habría impedido tomar la palabra en el tribunal.
En un testimonio interrumpido en varias ocasiones por las lágrimas, la familiar de Steenkamp explicó que la muerte de su prima le afectó profundamente, y debió medicarse por depresión y ansiedad. «Incluso mi hija ha ido a una institución que ofrece mecanismos de apoyo para jóvenes», agregó Kim, quien afirmó que «mi hija y Reeva eran muy cercanas y no pudo soportar su fallecimiento».
Durante la declaración, un Barry Steenkamp visiblemente desolado apoyó en varios momentos la cabeza sobre el banco del tribunal, mientras su mujer June le consolaba. Mientras, en el otro extremo de la sala Pistorius rompió a llorar con la mirada al frente o dirigida al suelo.
El fiscal pide una dura condena para Pistorius
Pero no todo han sido lágrimas. El fiscal Gerry Nel finalizó previamente su interrogatorio a la trabajadora social Anette Vergeer, último de los cuatro testigos citados por los abogados de Pistorius. Vergeer volvió a insistir en recomendar a la jueza Thokozile Masipa que el atleta cumpla una sentencia de arresto domiciliario, ya que las cárceles sudafricanas no están a su juicio preparadas para albergar a discapacitados.
Ante esto el fiscal aseguró que Pistorius no acabaría en una celda con detenidos peligrosos y que, por tanto, no estaría en peligro, porque existen departamentos para prisioneros minusválidos y vulnerables en las cárceles. En cuanto a los problemas de higiene que suponen sus muñones y el mantenimiento de sus prótesis no serían insalvables, porque las celdas de esos departamentos tienen aseos adaptados y bañeras. No satisfecho, Nel ya ha anunciado que llamará a declarar -previsiblemente el jueves- a funcionarios de prisiones que lo refuten, comparecencias que podrían poner punto y final a este procedimiento de sentencia.
El fiscal volvió a mostrar su intención de reclamar una dura condena para Pistorius a pesar de las apelaciones al posible trauma para el velocista, culpable del homicidio involuntario de su novia. «Si la sentencia de esta Corte es demasiado leve, la sociedad va a perderle el respeto a la justicia», declaró Nel durante el juicio emitido en directo por televisión y muy comentado en Sudáfrica.
«Dinero manchado de sangre»
Con respecto a la controversia generada por el dinero menual que le estaba pasando el velocista a la familia de su novia, el abogado de la familia Steenkamp publicó este miércoles un comunicado para aclarar este tema. La polémica surgió el martes, cuando el fiscal afirmó que la «madre de la difunta (...) no quería dinero manchado de sangre», esto es, los 375.000 rands (33.830 dólares) ofrecidos por Pistorius.
El abogado Petrus de Bruyn ha explicado que, en realidad, Pistorius pagó 6.000 rands mensuales (unos 540 dólares) a la familia Steenkamp, que tiene problemas financieros, entre marzo del 2013 y septiembre del 2014. Esos pagos jamás se hicieron públicos a petición del deportista. La familia dijo querer devolver este dinero tan pronto como fuera posible ya que era «dinero manchado de sangre»
La sentencia, antes del viernes
La jueza Thokozile Masipa ha anunciado que no estará disponible para proseguir este caso la próxima semana, por lo que todo apunta a que hará pública la sentencia de Pistorius antes del viernes. Las posibilidades de sentencia para el delito de homicidio en la ley sudafricana van desde una multa y la libertad vigilada hasta un máximo de quince años de cárcel.
Pistorius mató a tiros a Steenkamp a través de la puerta del baño de la habitación que compartían en la casa del corredor en Pretoria, en la madrugada del 14 de febrero del año pasado. La jueza aceptó la versión del atleta, según la cual disparó al confundir a su novia con un intruso, y consideró que el acusado no podía prever la muerte de la persona que se hallaba en el baño.
Esta decisión evitó a Pistorius la condena por asesinato y, por tanto, la cadena perpetua, sin embargo la jueza cree que el velocista actuó con negligencia al disparar contra la amenaza percibida en lugar de buscar otras alternativas, como pedir auxilio.