Los manifestantes se enfrentaron a la policía a pedradas e incendiaron contenedores y vehículos. Hay 350 detenidos
19 mar 2015 . Actualizado a las 01:13 h.Alrededor de 350 manifestantes han sido detenidos en Fráncfort en las primeras horas de la protesta organizada por el colectivo Blockupy por la inauguración de la nueva sede del Banco Central Europeo (BCE), informó la policía.
Las marchas comenzaron con violentos enfrentamientos entre grupos de manifestantes y los agentes antidisturbios desplegados en la ciudad, donde han ardido contenedores de basura y varios coches, incluidos vehículos policiales. Los manifestantes se han enfrentado a pedradas con los agentes.
Las fuerzas de seguridad, por su parte, hicieron uso de cañones de agua a presión para tratar de contener a los grupos de jóvenes que, desde la madrugada pasada, habían empezado con unas acciones de protesta que, por momentos, sorprendieron por su virulencia a la policía.
Al menos un agente resultó herido, según las primeras informaciones policiales, así como una manifestante.
Desde el cuerpo de bomberos se lanzó una llamada a través de twitter a los manifestantes a retirarse para poder hacer su trabajo y sofocar los incendios, multiplicados en contenedores de basura y barricadas desplegadas por distintos puntos de las inmediaciones de la nueva sede del BCE.
El grupo anticapitalista Blockupy había convocado para hoy una jornada de protesta, coincidiendo con la inauguración de la sede del Banco Central Europeo.
«El 18 de marzo de 2015 el BCE quiere inaugurar formalmente de forma pacífica su nuevo cuartel general en Fráncfort. ¡No hay nada que celebrar en una política de ahorro y empobrecimiento!», había declarado Blockupy, en la jornada precedente a la ceremonia.
El grupo anticapitalista calculaba que al menos 10.000 personas, llegadas de toda Europa, secundaran hoy su jornada de protestas.
Las autoridades de Fráncfort habían organizado un fuerte dispositivo policial para proteger las inmediaciones del edificio, así como otros puntos potencialmente vulnerables en la ciudad.
El presidente del BCE, Mario Draghi, inaugurará oficialmente la nueva sede sobre las 11.00, en un acto al que asistirán los gobernadores de los bancos centrales nacionales de la zona del euro.
Las entradas a la nueva sede del BCE, en la que desde finales del año pasado ya trabajan los empleados de la entidad monetaria, estarán bloqueadas mañana.
Un edificio que cuesta 1.200 millones
La nueva sede del Banco Central Europeo ha costado 1.200 millones de euros, 350 millones más de lo previsto inicialmente. Las obras del edificio, un rascacielos doble cuya torre principal se eleva hasta los 185 metros de altura, se han prolongado durante diez años. El consejo de gobierno de la autoridad monetaria europea explicó en el 2012 que el desfase en el presupuesto se debía, por un lado, al incremento de los precios de los materiales de construcción respecto a los calculados en el 2005; y, por otro, a problemas con el Gran Mercado Central, un edificio protegido en el que se integra el nuevo complejo.
Según declaró en su día el arquitecto autor del proyecto a Der Spiegel, el monumental y carísimo edificio recuerda al juego del futbolistas del Barcelona Leo Messi.