Molenbeek, un barrio en el corazón de la capital belga, sirvió de enlace para coordinar los últimos ataques terroristas
16 nov 2015 . Actualizado a las 13:04 h.«Los atentados han sido preparados en Bélgica». El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, no tiene dudas, a pesar de que medios como The New York Times ponen los ojos en Siria. Todas las investigaciones que se han llevado a cabo en los dos últimos años en torno a ataques terroristas apuntan en la misma dirección, al corazón de Bruselas. «Voy a hacer limpieza en Molenbeek», anunció el ministro del Interior belga, Jan Jambon. Los ojos están puestos en una de las comunas más ingobernables de la capital europea.
¿Cómo es por dentro?
Molenbeek está situado a 20 minutos a pie de la emblemática Grand Place de Bruselas. La comuna alberga una población de más de 95.000 habitantes, el equivalente a la de una ciudad como Santiago. La comunidad inmigrante tiene un peso muy importante. Por nacionalidad, los marroquíes encabezan el censo (25,5 %). En su mayoría, jóvenes de entre 25 y 39 años. Se trata de la segunda comuna, de las 19 de Bruselas, más castigada por el desempleo (30,7 %) y la pobreza.
¿Por qué está en el punto de mira?
Por los lazos estrechos que relacionan a los terroristas con este barrio. Uno de los atacantes de París procedía de esta comuna, donde la policía requisó un coche empleado en los asaltos. También siete personas fueron detenidas el sábado. No es la primera vez. El autor de la matanza en el Museo Judío de Bruselas en mayo del 2014, Nemmouche Mehdi, residía temporalmente en Molenbeek, al igual que el autor del ataque frustrado al tren Thalys en agosto de este año, Ayoub El-Khazzani, quien vivía con su hermana en el barrio. La masacre cometida en París por los hermanos Kouachi contra el satírico Charlie Hebdo en enero también condujo hasta Molenbeek, donde detuvieron a nueve presuntos yihadistas tras varias redadas en diferentes ciudades belgas. El asaltante del supermercado judío de París, Amedy Coulibaly, también habría mantenido contactos en ese barrio, centro logístico para los yihadistas.
¿Cómo operan los terroristas?
Molenbeek es un enclave para poner en marcha los preparativos de los ataques y protegerse. Los terroristas no suelen residir allí de forma permanente. Utilizan una red de contactos que les da cobijo. «No vienen todos de aquí, muchos están de paso», asegura su alcaldesa. Françoise Schepmans explica que tienen detectadas a 30 personas con vínculos con Siria, que o han regresado o que aún están allí. La policía intenta estrechar el cerco sobre las mezquitas clandestinas, que podrían estar reclutando a jóvenes.
¿De dónde vienen y cómo se preparan?
Bélgica es el país que más yihadistas alberga (494) en proporción a su población de 11 millones de habitantes. Unos 272 se han marchado a Siria e Irak para enrolarse en las filas del Estado Islámico. Al menos 134 han regresado y están bajo vigilancia. Son los denominados «combatientes extranjeros». La mayoría reciben formación militar, se les instruye en las técnicas más letales para atentar y vuelven con el objetivo de perpetrar ataques en Europa, como ha ocurrido con algunos de los autores de la masacre en París, coordinados desde Siria.