El referéndum sobre la permanencia de Reino Unido podría tener consecuencias constitucionales para la unidad británica por la división existente entre los territorios que la integran
24 jun 2016 . Actualizado a las 08:28 h.La primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, ha recalcado este viernes que «la gente de Escocia ve su futuro como parte de la UE», tras la votación sobre la permanencia de Reino Unido en el bloque continental.
«A falta de que se declaren los resultados finales, la votación aquí (en Escocia) deja claro que la gente de Escocia ve su futuro como parte de la UE», ha indicado en su comunicado, agregando que es «un mensaje firme e inequívoco». Así, ha destacado que «Escocia ha contribuido de forma significativa a la permanencia en Reino Unido», al tiempo que ha manifestado que "es un reflejo de la campaña positiva" de su partido, el SNP.
El referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la UE podría tener consecuencias constitucionales para la unidad británica debido a la división existente entre los territorios que la integran, puesto que frente a la fragmentación que Inglaterra presenta en las encuestas, Escocia, Gales e Irlanda del Norte apoyan mayoritariamente la continuidad.
Los escoceses, gobernados por el SNP, aunque no por mayoría absoluta, han advertido de un resurgimiento de los objetivos independentistas si el plebiscito los forzarse a abandonar el bloque comunitario.
De hecho, a diferencia del plebiscito de 1975 que ratificó la adhesión británica a la por entonces Comunidad Económica Europea, los partidos nacionalistas de Escocia y Gales apoyan ahora el mantenimiento del vínculo con Bruselas.
Escocia constituye, de hecho, la mayor amenaza desde una perspectiva territorial, no sólo por constituir la única de las cuatro naciones británicas que tiene al frente a un ejecutivo nacionalista, puesto que Gales cuenta con un gabinete laborista e Irlanda del Norte, con una coalición de unionistas y republicanos.