Un estudio rescata un episodio desconocido de la historia local
05 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La iglesia de Santa María de Proendos es conocida por poseer vestigios románicos y otros elementos arqueológicos de diversas épocas. Mucho menos sabido es el hecho de que el templo albergó durante el siglo XVIII una de las primeras escuelas públicas de la comarca de Lemos, que además seguía unos planteamientos pedagógicos notablemente avanzados para su época. La historia de este colegio es rescatada en el libro La escuela de Proendos, de José María Lago Bornstein, que será presentado mañana -a las 12 horas- en la galería Sargadelos de Monforte.
Los datos recopilados por Lago en diversos archivos indican que la escuela fue fundada en 1727 por iniciativa del sacerdote Pascual Pérez de Armesto, aunque no empezó a funcionar hasta el 1 de noviembre de 1730. A pesar de su condición de eclesiástico y aunque para ponerla en marcha se contó con el apoyo económico del Colegio del Cardenal -entonces regentado por la Compañía de Jesús-, el fundador dejó establecido que sería una institución de carácter seglar, no supervisada por la Iglesia católica.
El colegio fue puesto en manos de un patronato laico y su escritura de fundación -según indica el investigador- recogía unas condiciones «que la hacían ser una institución pionera en el ámbito rural, priorizando la educación social frente a la religiosa».
La escuela ofrecía enseñanza gratuita a todos los niños y niñas de Proendos de hasta 16 años. Los de otras parroquias y los que superasen esa edad debía aportar una pequeña cantidad. Las materias de estudio -aunque incluían la doctrina cristiana- se centraban en la lectura, la escritura y las cuentas. Las clases eran impartidas por un maestro laico que cobraba treinta ducados al año, un salario más bajo que el de los jornaleros o albañiles, por lo que debía compaginar esta labor con las faenas del campo.