Aida Menéndez asegura que seguirá defendiendo la idoneidad de su asociación para gestionar un centro de acogida a peregrinos y su ubicación en el antiguo hotel Comercio.
-¿Por qué tanta indignación?
-No esperábamos esta negativa. Yo dije cuando me marchaba del pleno que no nos parece de recibo que primero nos alabase y después nos diesen la espalda.
-¿Por qué piensan que les están dando la espalda?
-Porque entendemos que lo que estamos pidiendo es bueno para el conjunto de la ciudad y de los peregrinos. Que los políticos no se pongan de lado de quien quiere prestar un servicio que es necesario... De ahí surge nuestro enfado, nuestra indignación. Hasta ahora, nuestra lucha estaba enfocada a buscar la oficialidad del Camino de Invierno, que fue un trabajo de muchos años en el que nadie creía. Una vez conseguido, ahora queremos estar del lado del peregrino, porque vemos que esto es lo que ocurre en otros lugares con otras asociaciones.
-¿No les vale la alternativa del Centro do Viño?
-No. Quien la plantea está confundiendo peregrinos con turistas, demuestra no entender el mundo jacobeo. Un peregrino no es un turista, busca otro tipo de valores. Nosotros lo atenderíamos de forma voluntaria y si en el futuro vemos que no podemos, entonces ya se hablaría y ya miraríamos si hace falta apoyo institucional. Esta negativa supone darle la espalda a la asociación y al desarrollo de la ciudad. No merecemos estos políticos.