Los cosecheros  pusieron a la venta este fin de semana 2.000 kilos de cerezas

Ribas de Sil celebró este fin de semana la catorce edición de la Festa da Cereixa e o Aceite. Para las cerezas está siendo una cosecha complicada, pero aun así se pusieron a la venta alrededor de 2.000 kilos de este fruto, según datos de la organización. Fueron treinta los expositores que instalaron sus puestos en la playa fluvial de San Clodio. Y no solo ofrecían cerezas. También pusieron a la venta aceite de los olivares de la zona y otros productos típicos como quesos o miel.

El alcalde, Miguel Sotuela, defiende la singularidad de la cereza de Ribas de Sil. «É única e inconfundible», dijo en la presentación oficial del programa la feria. Fue el pasado viernes en la sede de la Diputación de Lugo, que contribuye al presupuesto de la muestra que tiene lugar en San Clodio con una ayuda de 3.000 euros. Sotuela cree que las cerezas y el aceite de los pequeños cosecheros son el mejor reclamo para animarse a conocer también la riqueza paisajística de ese municipio.

Los puestos permanecieron abiertos desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la tarde del sábado. «O día forte sempre é o domingo», señalaba un cosechero la víspera del día principal, en el que la feria estuvo muy concurrida. Las cerezas se vendieron en cajas de dos kilos, con precios que oscilan entre los cinco y los diez euros, según las variedades y tamaños del fruto.

Actuaciones musicales

A lo largo de la jornada de hoy se sucederán las actuaciones musicales en la zona en la que se ubican los puestos. Está prevista la actuación de la charanga Madialeva y del grupo A Petaca do Demo, además de las bandas de gaitas de la Diputación de Lugo y de la Escola de Música de Ribas de Sil.

«Debemos seguir promocionando a cereixa de Ribas de Sil, que é única e inconfundible»

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