
Los trabajos se generalizan para que las vides puedan concentrarse en producir nuevos brotes que sustituyan a los que quedaron quemadas por la bajada de las temperaturas
02 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los viñedos de la Ribeira Sacra ofrecen estos días una estampa insólita. Los viticultores se ven obligados a realizar una nueva poda, en pleno mes de mayo, para ayudar a las cepas a que se recuperen de la helada. Algunas bodegas iniciaron estas tareas cuando se produjeron los daños. Ahora los trabajos se generalizan para que las vides puedan concentrarse en producir nuevos brotes que sustituyan a los que quedaron quemadas por la bajada de las temperaturas.
No es una poda de la que se pueda esperar una recuperación importante de la cosecha, debido a la época avanzada en la que se produjeron las heladas. «Xa o di o refrán. Viño de maio, pouco e malo. Pero polo menos imos ver se agroman de novo», señalaba ayer un viticultor de Pantón. El siguiente paso, según las recomendaciones de los técnicos, debería ser la aplicación de algún tratamiento que ayude a que cicatricen los daños que causó la caída de los sarmientos.
La Estación de Enoloxía e Viticultura de Galicia (Evega) hizo públicas una serie de recomendaciones para recuperar las cepas. En las vides en las que los racimos resultaron poco afectados, y solo se chamuscaron las puntas de las varas, los expertos aconsejan no limpiar partes dañadas hasta que pase la etapa de floración. La poda sí debe realizarse cuanto antes en las cepas más dañadas para propiciar nuevas brotaciones.
Tras la supresión de las partes quemadas por la helada, Evega sugiere la conveniencia de aplicar productos cicatrizantes, en primer lugar, y fertilizantes, posteriormente.
La incidencia de las heladas fue desigual en la Ribeira Sacra. Mientras las riberas del Miño libraron casi por completo, en las del Sil y el Cabe se produjeron daños muy importantes. «Xeou incluso en zonas abrigadas da ribeira onde ninguén recorda cousa igual», señala un bodeguero de Amandi. En Quiroga, la zona más afectada, el Ayuntamiento ya solicitó la declaración de zona de emergencia.