El Concello de Vilalba quiere adecuar la cría de capones a las perspectivas de futuro que maneja para el producto. Los avances de los últimos años, con innovaciones en el cuidado y en la presentación, y los planes que se trazaron con un estudio de mercado sobre la comercialización de una variedad de menos peso que se distribuiría en cantidades mucho mayores durante todo el año reflejan esas nuevas pautas.
Al mismo tiempo, sin embargo, el número de criadores va reduciéndose poco a poco y la edad media va incrementándose. La posibilidad de introducir un relevo generacional o de ofrecer a personas ajenas a esta actividad tradicional una formación que les ayude a introducirse son dos de las finalidades que pueden lograrse en un curso que empieza mañana, organizado por el Concello y dirigido a mujeres.
El modo en que se pretende trabajar en el curso, que se impartirá en una de las aulas del consistorio y que tendrá también visitas prácticas, parece claro: «Hai que dar unha formación integral nos aspectos teóricos e nos prácticos», dice el técnico de Emprego, Gonzalo Hermida.
Un criador de capón, dice Hermida, está sujeto a una normativa de avicultura en la que el papel de varias administraciones incluye también la intervención del Concello: la identificación del criador o la del animal que entra en la feria anual de Vilalba son algunas muestras de ese aspecto.
A Hermida no se le escapa que la edad media de los criadores va siendo cada vez mayor, pero también recalca que el estudio de I+D impulsado por la Xunta y por la Universidade de Santiago de Compostela (USC) abría la puerta a nuevas perspectivas: convertir en alternativa económica lo que hoy es más bien un complemento económico parece uno de los objetivos que se podrían conseguir, aunque ello implique, afirma, una mayor profesionalización.
«Un paso máis»
«As cousas teñen que ir pola vía da profesionalización, e o curso é un paso máis», dice Hermida, que no solo recalca la amplitud de los contenidos sino el hecho de que se haya buscado la presencia de mujeres jóvenes. Además advierte de que si se cumplen los propósitos marcados con la comercialización de una variedad que se distribuya todo el año, las personas que hayan logrado una formación adecuada estarán en mejor posición de afrontar los retos de esa nueva etapa.