Oscars 2014: La nueva generación de directores piden paso con permiso de Martin Scorsese

La Voz MARÍA LUZ CLIMENT MASCARELL | DPA

CULTURA

El director de «El lobo de Wall Street» se enfrenta como mejor director con Alfonso Cuarón, que podría convertirse en el primer latinoamericano en ganar en esta categoría; David O. Russell, Steve McQueen y Alexander Payne

27 feb 2014 . Actualizado a las 21:27 h.

Una nueva generación de directores se abre camino en Hollywood con paso firme: Alfonso Cuarón, David O. Russell, Steve McQueen y Alexander Payne podrían marcar el cine que venga en los próximos años y su talento se ensalza ahora con una candidatura al Oscar a la mejor dirección, honor que comparten con todo un veterano: Martin Scorsese.

Alfonso Cuarón

Alfonso Cuarón, proclamado mejor director con Gravity por numerosas asociaciones de críticos estadounidenses, se ha llevado ya el Globo de Oro y hasta el premio del Sindicato de Directores estadounidenses, una suerte de oráculo de cara a los Oscars.

A pocos días de la gran cita de Hollywood, el director mexicano podría convertirse el 2 de marzo en el primer latinoamericano en ganar el premio Oscar al mejor director gracias a su drama espacial en 3D que ha definido como una metáfora sobre la adversidad en la vida. Alfonso Cuarón, de 52 años, es uno de los grandes favoritos con este «viaje emocional» interpretado por Sandra Bullock y George Clooney.

La aclamada Gravity podría ser su consagración. Sólo otro mexicano, Alejandro González Iñárritu, estuvo antes nominado al Oscar como mejor director, pero sin suerte. «Voy a celebrarlo gane o no, porque las fiestas son buenas», aseguró Alfonso Cuarón a un diario mexicano

Steve McQueen

El director británico es el más joven de los candidatos y el único debutante en esta categoría. El cineasta, que comparte nombre y apellido con un sex symbol y rebelde de Hollywood, tiene como carta de presentación un trío de ases: Hunger, Shame y 12 años de esclavitud, la película con la que aspira ahora al Oscar como mejor director y a otras ocho más.

Steve McQueen ha elevado el dolor y el sufrimiento a la categoría de arte tal como demostró con Hunger, con la que consiguió destacar en la vorágine de Cannes en 2008 mostrando la huelga de hambre de los prisioneros republicanos en Irlanda del Norte. En Shame agitó y emocionó con una relación incestuosa. Con 12 años de esclavitud revive el drama de los esclavos en Estados Unidos y que le ha valido su primera nominación a los Oscars como mejor director.

Alexander Payne

La comedia agridulce es el medio natural en el que se mueve el estadounidense Alexander Payne que ya consiguió dos estatuillas como guionista adaptando Sideways y Los Descendientes. Su último y mayor éxito, es el que le ha permitido conseguir financiación para convertir en realidad un sueño personal: rodar Nebraska, una película en blanco y negro en su Omaha natal en el estado norteamericano que da nombre a su película y con la que este año se apunta su tercera nominación al Oscar como director.

Alexander Payne seguramente no esperaba todo lo que ya ha conseguido con su séptima película, una pequeña producción que ya debutó con fuerza tras ser seleccionada para el Festival de Cannes, donde su protagonista Bruce Dern se llevó el premio al mejor actor y ahora aspira a seis estatuillas. Aunque no figura entre los favoritos de los Oscars, el director podría dar la sorpresa de la noche.

David O. Rusell

Desde que en 2010 pisara por primera vez la alfombra roja de los Oscars con The Fighter, que aspiraba a siete estatuillas y recogió dos, David O. Russell parece abonado a los premios Oscars. Así lo volvió a demostrar en el 2012 con El lado bueno de las cosas.

El neoyorquino tiene fama de ser duro con los actores, pero consigue que éstos se lleven a casa la estatuilla que él se le resiste. La gran estafa americana, que lidera las nominaciones a los Oscars junto con Gravity, supone su tercera oportunidad de alzarse con un premio que, según las casas de apuestas, podría hacerse de nuevo de rogar.

Martin Scorsese

A pesar de ser uno de los directores más prestigiosos del panorama estadounidense con alguno de sus trabajos considerados ya un clásico del cine, sorprende que Martin Scorsese tan sólo haya recogido una vez la estatuilla por el Oscar al mejor director. Y fue hace apenas siete años con Infiltrados, considerado un trabajo menor dentro de su amplia trayectoria.

Martin Scorsese, el más veterano de los candidatos consiguió su primera candidatura a mejor director con Raging Bull. La mayor decepción se la debió llevar con Gangs of New York, que en 2003 le hizo recoger el Globo de Oro pero no el Oscar al mejor director.

Acabó así convirtiéndose en eterno candidato al Oscar hasta que rompió el maleficio con una historia de gánsters y, aunque ahora cambia el crimen organizado por el reino de la corbata y el traje a medida de Wall Street, Martin Scorsese vuelve a con El lobo de Wall Street, que aspira en total a cinco premios Oscars.