De 41 a 5, de la realidad a la cosmética

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta PAISANAJE

OPINIÓN

30 ago 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Sostiene Fátima Báñez, ministra cuyo único empleo conocido ha sido (es) militar en el PP, que «la existencia de un elevado número de formularios y un sistema complejo de bonificaciones a la contratación suponen una barrera para el pequeño empresario». Hay hasta 41 modelos diferentes que, si sale adelante su idea (que saldrá), se reducirán a 5. Loable reducción administrativa que la tozuda realidad terminará por demostrar como un cambio cosmético. Sin más. El problema del (des)empleo en España no son 41 papeles ni 5. No. Es un elevado déficit que obliga a meter tijera en todas las Administraciones, impidiendo que afronten planes de estímulo. Es una más que preocupante atonía del mercado interior, es decir, un desplome del consumo, que lleva al cierre de negocios. Es una prolongada pendiente de caída del crédito desde hace más de dos años, y que bloquea la creación de empresas y, por tanto, de empleos. Es una maraña de impuestos que atrapan a los autónomos y les lleva a tirar la toalla. Es una falta de expectativas que provoca la emigración de recursos humanos de primer nivel. El problema del (des)empleo va más allá de la burocracia, de 41 a 5. Y esa realidad debería saberla la ministra.