La noche del domingo se escrutó el censo de electores residentes en España con derecho a voto en Cataluña (CER), integrado por 5,3 millones de personas. La tasa de participación registrada fue del 77,4 %, pero esta cifra descenderá al 74,5 % cuando se incorpore el escrutinio del CERA, los casi 200.000 electores con derecho a voto residentes en el extranjero.
Junts Pel Sí (62 escaños) y CUP (10) han reunido casi dos millones de votos, doscientos mil más que los conseguidos por CiU, ERC y CUP en el año 2012. Luego el primer dato relevante de estas elecciones se refiere al tamaño actualizado de la nación catalana, porque de una u otra forma, antes o después, estas elecciones han sido asumidas por todas las partes como plebiscitarias. Dos millones de personas son cinco de cada diez de los que han votado, y resulta irrelevante, desde el punto de vista del comportamiento electoral, si estos dos millones representan el 48 % o el 52 % de los votos válidos, porque el dato es cinco de cada diez, ni seis ni cuatro. Respecto a la UDC de Duran i Lleida, aunque sume cien mil votos en el parcial soberanista, nadie los considera, ni resolverían esta discusión, ni estuvieron, ni están en contienda.
El resultado más llamativo de estos comicios es el de Ciudadanos (25 escaños), que se consolida como la segunda fuerza política de Cataluña, con más setecientos mil votos y catorce actas de ventaja sobre el PP. Ciudadanos ha conquistado cerca de medio millón de votos y dieciséis escaños en esta convocatoria, y lo que es más importante, ha laminado al Partido Popular, ha doblegado al PSC-PSOE de Miquel Iceta y Pedro Sánchez, y ha humillado a Coleta Morada, todo esto en vísperas de las elecciones generales.
Asociado a este suceso nos encontramos con el fracaso del PPC de Xavier García Albiol (11 escaños), muy alejado de los registros del año 2012. El PP ha perdido más de cien mil votos, sobre todo porque su discurso uninacional inmóvil se ha agotado por completo en esta campaña. Por resumirlo, puestos a elegir entre ellos o el caos, se han quedado con ellos el 8,5 % de los que votaron el domingo, mientras que el 91,5 % restante eligieron el caos.
Aunque el gran derrotado ha sido, sin lugar a dudas, Catalunya Sí Que Es Pot (11 escaños). Como en el caso del PP, sus muy lamentables registros tienen que ver con la inteligencia de las personas. Porque una cosa es tomar el cielo al asalto, pero otra muy distinta es repartirse el negocio con Joan Herrera en Cataluña, o pretender hacerlo con Mónica Oltra en la Comunidad Valenciana. Lo primero es heredero del 15M, contiene el ingrediente de El Gamonal, se expresa como «sí se puede» y estaba llamado a ser la segunda fuerza política de Cataluña, mientras que lo segundo es vieja política de cuotas y es tratar a los electores de la ruptura como idiotas. Catalunya Sí Que Es Pot (11 escaños) ha perdido frente al PSC (16) y ha fracasado en vísperas de las elecciones generales, porque sus 364.000 votos no han servido ni para igualar el último resultado de ICV-EUiA (13).