«Nos causa una gran ilusión y una sopresa grande», dice Leonardo Lemos, quien espera de Francisco I que siga con la Nueva Evangelización
14 mar 2013 . Actualizado a las 00:25 h.En la antesala del despacho, el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet, agarra un marco con la foto del símbolo de la Sede Apostólica Vacante. «Tenía el retrato de Benedicto XVI y ahora hay que poner el del nuevo papa», dijo. Monseñor Lemos se mostró sorprendido tras una jornada de emociones. Menos de una hora antes de ser elegido el nuevo papa, el obispo de Ourense estaba celebrando una misa por un sacerdote difunto. «Le había pedido al pueblo que rezara por los cardenales que estaban en el cónclave y al llegar a casa me encuentro con el notición». Y añadió: «Siento ilusión, sorpresa y un poco de desconcierto también porque si nos dejamos llevar de las quinielas de estos días, ya os podéis imaginar. El cardenal Begoglio es hijo de emigrantes italianos en Argentina. Se le notaba que le costaba expresar las primeras palabras en italiano, incluso en el rezo del Padrenuestro tuvo ciertas dificultades que el ceremoniero le iba soplando por detrás. Nos causa una gran ilusión y al mismo tiempo una esperanza grande porque los criterios de la Iglesia no son los criterios con os que funcionan otras instituciones. Siempre nos sorprende el Espíritu Santo. Yo soy el primer sorprendido por el nombramiento».
Leonardo Lemos no tenía otras referencias del nuevo pontífice. «He de esperar que continúe en la Nueva Evangelización y viniendo de Latinoamérica, de Argentina, conoce bien la realidad del continente de la esperanza, que lo es junto con África». Este ha sido uno de los cónclaves más breves de cuyo resultado el prelado ourensano se enteró de la noticia por la RAI, «porque collía o sinal do Centro Televisivo Vaticano», dice cambiando de registro. Lo que espera Lemos Montanet de Francisco I es esto: «Non é un Juan Pablo II, polo que se ve, inda que penso que estaba el mesmo tremendamente sorprendido e moi emocionado. Hei de esperar que se continúe coa Nova Evanxelización e vindo o papa de Latinoamérica, en concreto de Arxentina, coñece moi ben toda esa realidade do continente da esperanza, que o é xunto con África». Considera el obispo de Ourense que Francisco I se preocupará «por coidar a relación fe-cultura, estará moi presente nos medios, preocuparase tamén, como fixo en Buenos Aires, da situación do clero, das vocacions sacerdotais que son preocupacións de todo bispo e naturalmente ao de Roma tenlle que preocupar ben».