Joaquín Bello: «El ajedrez debe estar en los centros escolares desde edades tempranas»
OURENSE
Forma parte del equipo liceísta y de su programa «Aprender a Aprender»
20 jul 2014 . Actualizado a las 14:00 h.Joaquín Bello Filgueira es como esos viejos roqueros que se resiste a colgar su guitarra. Quizás su reflexiva postura resulte más idónea frente al tablero de los 64 escaques, pero el hecho de que el campeón provincial de 1963 siga luchando en el siglo XXI por nuevos títulos -tras anotarse el de 2010- llama la atención como ejemplo de tenacidad.
A este veterano afincado en la capital ourensana es fácil encontrarlo en el Liceo de Ourense: «Desde que me casé y me vine a la ciudad fue un sitio que me gustó mucho, aquí hemos construido un equipo de ajedrez y una escuela que han llevado el nombre de la entidad y de la provincia por toda España e incluso por el extranjero».
Y es que Bello recuerda como ha competido en torneos en Portugal o en otros países de Europa como Italia, sin olvidar sus primeros pasos en el deporte ciencia, que lo cautivó a eso de sus ya lejanos 8 años: «Fue con mi padre, en una época de mesa camilla, por entonces no había televisión y él me fue indicando como se movían las piezas y jugamos nuestras primeras partidas».
De la etapa en que fue habitante de Ribadavia, donde su padre ejercía la medicina, persisten los recuerdos de otro de sus primeros profesores: «Era Maté, trabajaba en Renfe y viajaba gratis, así que se desplazaba para jugar nuestras partidas y aleccionarme». De todos modos, tampoco olvida aquellas partidas que los intelectuales ourensanos libraban en el Café Moderno: «Los camareros no nos dejaban entrar porque éramos menores y me pegaba a la ventana para ver los movimientos de Luis Trabazo, del mismo Maté o de los médicos, Eustaquio Álvarez, Cándido Pavón o Miguel Echegoyen».
A la larga, él mismo se convirtió en veterano ajedrecista y vio como nacían promesas como el joven Iván Salgado, que salió de las fronteras ourensanas: «Su hermano Óscar estuvo con nosotros y a él también lo vimos empezar. Para mí, perdió dos años, porque desde que se fue Shirov no siguió entrenándose con una escuela con nivel, como la que encontró ahora en Bulgaria, aún es joven y está a tiempo de entrar entre los mejores del mundo».
El capítulo formativo es otra de las pasiones de Joaquín Bello, director técnico de la Escuela del Liceo y del programa Aprender a Aprender, en el cual «colaboramos con la Concellería de Educación de Ourense, utilizando el ajedrez como herramienta educativa, comenzó el pasado año en Educación Infantil en los colegios de Covadonga y Eiroás, con excelentes resultados, este curso ampliamos a los centros de Las Mercedes, Albino Núñez y Mariñamansa, ya con más de doscientos escolares». Su resumen es claro: «Esta experiencia nos reafirma que el ajedrez debe estar en todos los centros escolares desde las edades más tempranas».
Joaquín bello filgueira