Un policía local de Poio a uno nacional: «Yo notifico la multa y si queréis la recurrís»

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

El SUP denuncia un «exceso de celo» de un agente municipal que multó a otro de la Comisaría que estaba utilizando el móvil mientras participaba en una operación contra el crimen organizado

03 nov 2014 . Actualizado a las 19:02 h.

Si meses atrás fueron las multas por girar el cuello más de 45 grados, hoy es una nueva multa por emplear el teléfono móvil la que ha vuelto a situar a la Policía Local de Poio en el ojo del huracán. Y es que el sancionado, según acaba de denunciar el Sindicato Unificado de Policía, es una agente de la Comisaría que realiza un seguimiento en el marco de una investigación contra el crimen organizado.

Según explicaron desde la central, el funcionario de la Comisaría se identificó con la placa y el carné profesional, documentos que, al parecer, no fueron suficientes para el municipal: «El policía local, en actitud chulesca y altanera, requiere al policía nacional su DNI y la documentación del vehículo, a lo que se le responde que la placa carnet es suficiente para la plena identificación de un funcionario policial en el desarrollo de su actividad profesional». Añadieron que el denunciante llegó «a impedir que el funcionario descendiera del vehículo camuflado».

Este último trató en vano de explicarle que la propia legislación española exime de la prohibición de usar móviles al volante a aquellos «agentes de la autoridad en el ejercicio de las funciones que tengan encomendadas».

Ante la actitud persistente del agente municipal y el temor de que se frustrara en gran medida la investigación, el nacional accedió a entregarle el DNI. Desde el SUP precisaron que, en un momento dado y ante la presencia del responsable del disposito policial, el funcionario del Concello de Poio replicó a las explicaciones relativas a que podían hacer uso del móvil mientras conducían que «eso a mi me da igual. Yo notifico la multa y si queréis la recurrís».

Para el sindicato, la actitud del denunciante fue de «exceso de celo» demostrando «un claro incumplimiento de la colaboración a la que está obligado en función de su condición de miembro de un cuerpo de seguridad y de policía judicial (...). No nos extrañaría que se tratara del mismo Agente que, no hace muchos meses, sancionó a varios conductores por girar la cabeza, con gran repercusión mediática, obligando a intervenir a la propia Alcaldía».

Además, reclaman que las autoridades del Concello de Poio «adopten cuantas medidas sean necesarias, incluidas las disciplinarias, para que hechos como estos no vuelvan a repetirse».