Bankia debe retirar el supervelero de Factoría Naval antes de julio

Marcos Gago Otero
MARCOS GAGO MARÍN / LA VOZ

PONTEVEDRA

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El buque no entra en la operación de compra del astillero por Nodosa

07 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Iba a ser el mayor velero del mundo, con 136 metros de eslora de acero, tres mástiles y un velamen desplegado de más de cuatro mil metros cuadrados. Sin embargo, la crisis del metal se cebó en Factoría Naval de Marín y del Sea Cloud Hussar, el nombre que iba a llevar este enorme velero, solo se llegó a construir el casco. Hace cuatro años que el buque se encuentra en el dique seco de Factoría Naval, pero esta prolongada estancia tiene fecha de caducidad. Bankia es la actual propietaria de este barco y tiene hasta el 31 de julio de este año como fecha tope para retirarlo de las instalaciones del astillero y llevárselo para una nueva ubicación, previsiblemente fuera de la ría de Pontevedra.

La crisis de Factoría Naval obligó al astillero a entrar en concurso de acreedores por segunda vez en dos años y, ante una abultadísima deuda, el administrador concursal, con el beneplácito de lo que quedaba de la plantilla, optó por el concurso público para venderlo. Los ganadores de esta puja son el otro gran astillero de la ría, Nodosa, que está solo pendiente de formalizar el trámite de firma del documento de compra para poner al día a Factoría Naval. El expediente se resolvió a mediados del mes pasado, pero las fiestas han ralentizado el trámite burocrático, aunque no hay ningún obstáculo que impida su conclusión. La Autoridad Portuaria, por ejemplo, ya adelantó el cambio de concesión de las instalaciones a nombre de Nodosa.

Cuando las rampas de varada de Factoría pasen a pleno control de Nodosa, tendrán que solucionar la cuestión del supervelero, que en la actualidad ocupa una parte nada despreciable del recinto. Un portavoz de Nodosa explicó que el buque no entra en la operación de venta del astillero, sino que se le adjudicó al acreedor hipotecario, que es Bankia. Existe un compromiso de negociación y de bajarlo de la rampa de varada antes del 30 de junio de este año.

Será Bankia quien se encargará de la venta del buque, mientras que Nodosa, previsiblemente, asumirá los trabajos para ponerlo a flote. Desde este astillero marinense se indicó que no entra en sus planes pujar por quedarse con el supervelero, por lo que a la entidad bancaria no le quedará otro remedio más que buscar un armador interesado en él.