Los vuelos de Ryanair en Oporto, la variante por la costa que se ha hecho oficial y servicios nuevos, claves del éxito
25 sep 2016 . Actualizado a las 05:10 h.El itinerario portugués para ganar la Compostela es el preferido por uno de cada cinco peregrinos que hacen el Camino. La ruta que nace en Lisboa, sube hasta Oporto y discurre por trece municipios de la provincia de Pontevedra está de moda. Engorda a razón de entre un 16 y un 20 % cada año desde el 2005 y se está revelando con una de las potencialidades turísticas más relevantes del sur de Galicia.
El Camino Portugués atraía a 5.507 peregrinos en todo el 2005 y en el 2015 lo recorrieron 43.151 personas. La escalada ha sido constante, con el esperado pico del año santo del 2010. Los registros oficiales apuntan a que el 2016 batirá un nuevo récord ya que hasta el 31 de agosto habían pasado por los 118,4 kilómetros que separan Tui de la capital gallega 37.439 personas, que representan el 18,7 % de todos los peregrinos a Santiago por los distintos caminos. En el mes de abril, llegaron a ser el 22 % los que optaron por la vía lusa y en el de mayo, el 19,5 %.
El Camino Francés, que sigue siendo el más utilizado con diferencia, fue recorrido en los ocho primeros meses del año por 200.263 peregrinos, pero no ha registrado una variación significativa entre agosto del 2015 y el de este año.
Y el fenómeno sigue al alza. La Asociación de Amigos del Camino Portugués prevé que en el próximo año santo del 2021 se triplique el número de usuarios de esta ruta.
Hay varias claves que explican el éxito. La múltiple oferta hostelera de hospedaje y demás servicios, así como el reconocimiento de la variante de la costa, que ya existía de facto pero que no se hizo oficial por parte de la Xunta hasta el pasado mes de abril, son dos de ellas. Esta senda marítima, que también se conoce como Camino Monacal por su vinculación y paso por la abadía cisterciense de Oia, la única de España que está en la costa, parte de Oporto y finaliza en Redondela, donde se conecta con el Camino Portugués del interior que entra en Galicia por Tui. Tiene 68 kilómetros más de recorrido por tierras gallegas hasta alcanzar Compostela, transitando por A Guarda, Baiona, Nigrán, Vigo y Redondela, para seguir de ahí directamente hacia el norte.
La Diputación de Pontevedra también ha visto el filón turístico, sellando una alianza con los municipios lusos por los que transita la ruta para trazar estrategias conjuntas de cara a revitalizar, promover e incrementar la seguridad vial de la senda. El propuesta incluye la eliminación de puntos negros, la mejora de la señalización y la creación de nuevos productos turísticos vinculados al Camino. La Diputación espera que aumente un 25 % el número de peregrinos en el horizonte del 2019. Por ello impulsa la candidatura del Camiño Portugués a un programa europeo que permita la captación de fondos, en concreto de unos cuatro millones de euros.
Pero un factor determinante para multiplicar los peregrinos de la ruta lusa hay que buscarlo en el aeropuerto de Sá Carneiro. Las multinacionales aéreas se han fijado ya en el potencial de este nuevo Dorado turístico. «La afluencia de peregrinos depende de los vuelos de Ryanair. El éxito del Camino de la Costa depende de esta compañía y de la oferta de precios que hace a Oporto», asegura rotundo Manuel Martínez. Es uno de los primeros promotores de la vía, autor de su cartografía más detallada y miembro de la asociación de vecinos de Freixo, en Vigo. Esta entidad de la parroquia de Valadares gestiona desde el 2010 el único albergue público que hay en la ciudad más poblada de toda la ruta jacobea en Galicia. «Este año no solo estamos llenos, sino abarrotados. Tuvimos que pedir colchones a los vecinos. Según los vuelos, tenemos el día de los polacos, de los irlandeses o de lo que toque», explica.