El Teucro vacía la enfermería para seguir comandando la competición

Llegan buenas noticias desde la enfermería teucrista. Los hombres tocados progresan adecuadamente de sus diversas molestias físicas y poco a poco Quique Domínguez recupera efectivos en una fase trascendental de la temporada regular.

Con la idea del ascenso entre ceja y ceja el vestuario azul sigue trabajando como el primer día. Defender el liderato se traduce un soportar un extra de presión semana tras semana y en un deporte como el balonmano las lesiones y magulladuras están a la orden del día. Por si esto fuera poco hay luchar también contra los efectos de la gripe. Gonzalo Carro está mejor de sus síntomas, que ya arrastraba el pasado domingo en el derbi en Vigo ante el Octavio. Junto a él y por la misma razón David Pichel no está en óptimas condiciones, aunque trabaja con el resto de compañeros bajo la tutela de Domínguez y estará recuperado para el próximo compromiso, en casa, ante el Antequera.

Otro de los que acelera plazos para estar de vuelta es Carlos García, uno de los hombres fuertes del equipo y el máximo responsable de los lanzamientos desde el punto de penalti. El jugador arrastra desde hace días una pequeña rotura fibrilar en los isquiotibiales que le mantiene alejado de las pistas. Su recuperación va viento en popa, pero todavía no puede participar.

El que sí ha recibido el alta médica es Carlos Pombo, que está ya en la dinámica de grupo y podrá ser alineado por el técnico.

Por último, David Chapela ya corre con cierta normalidad. El jugador se recupera del esguince en el tobillo derecho, aunque no está previsto que reaparezca este fin de semana. Tendrá que seguir esperando.

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