El afectado no daba crédito a lo que le había sucedido en un espacio de apenas media hora
17 oct 2012 . Actualizado a las 11:38 h.Sucedió ayer de mañana en la aldea de Arufe, perteneciente a la parroquia amiense de Agrón. Ramón Álvarez y su mujer habían ido a llevar a sus dos hijos menores al colegio a Negreira, y cuando regresaron se encontraron con la desagradable sorpresa de que le habían robado una puerta de aluminio de dos hojas de la casa que cuida el matrimonio, lindante con la suya.
«Pensei que a deixara aberta, porque ten outra porta de cristal, pero cando me acheguei á casa, xa vin que a roubaran», cuenta este vecino amiense, que no daba crédito a lo que le había sucedido en un espacio de apenas media hora. Y aunque hay otras casas cercanas, además de encontrarse la vivienda en la carretera que conduce al complejo industrial de Feiraco, lo cierto es que los vecinos no se encontraban en casa, ni nadie vio a los autores de la sustracción, que tuvo que ejecutarse en cuestión de minutos.