El Refuxio de Animais recorta un 3,5 % sus sueldos y cobrará por las esterilizacións

M.O. santiago / la voz

SANTIAGO

El Refuxio tiene una plantilla de siete trabajadores y cuenta con el apoyo de 21 voluntarios.
El Refuxio tiene una plantilla de siete trabajadores y cuenta con el apoyo de 21 voluntarios. á. ballesteros< / span>

20 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El déficit que arrastra el Refuxio de Bando, que su directora cifró en 30.000 euros en este primer semestre, ha llevado al patronato de su fundación a fijar el cobro por la esterilización de los animales que salen de sus dependencias, gasto que antes iba incluido en los costes de la adopción, que alcanza también la vacunación y el microchip. Se trata de generar nuevos ingresos para tratar de revertir una situación que también les ha llevado a recortar costes.

De ahí que en paralelo se haya decidido una reducción salarial del 3,5 % para todos sus trabajadores, una medida consensuada con ellos, según explicaron ayer la directora de este servicio, Paloma Aguirre, y la concejala responsable del mismo, María Pardo. El recorte salarial será de aplicación inmediata, explicó Pardo, quien dio cuenta de que también se decidió actualizar las tasas de los precios que el Refuxio cobra por sus servicios y que llevaban dos años congeladas.

Según la edila, estas medidas se adoptan porque el Ayuntamiento «cree en el Refuxio y en que la gestión que tiene es la adecuada», dijo frente a cualquier alternativa que implique una gestión privada y un mayor recurso al sacrificio de los animales, añadió.

Pese al cobro por la esterilización de los animales en adelante, Aguirre sostiene que en este centro serán más económicos. Estarán «lejos de lo que puede cobrar cualquier clínica», aunque será decisión de las personas acogedoras elegir dónde deciden esterilizar al animal que se lleve del Refuxio. Para perros, el coste de este servicio será de 60 euros, que subirán a 100 en el caso de las perras de menos de 20 kilos y de 150 para las de más peso. La de los gatos costará 40 y las gatas, 50.

En Bando trabajan siete personas -la directora, una auxiliar administrativa y cinco cuidadores-, aunque también cuentan con la colaboración de 21 voluntarios. Precisamente, la última reunión de su patronato aprobó las normas de funcionamiento para este colectivo.