La décima edición de la feria ecológica de Arzúa, que se celebró este fin de semana, «conseguiu de novo ser un punto de encontro e referente do sector a nivel galego e estatal», destacan desde Culturactiva, el colectivo organizador, que hace extensible su balance al que por su parte realizaron los expositores y público consultados. La primera década de la cita ha cerrado «cun bo volume de ventas e, sobre todo, coa visita de milleiros de persoas interesadas por adquiriren hábitos de consumo máis respectuosos coa contorna», añaden.
La organización ha constatado entre el medio centenar de expositores que participaron en la feria ecológica -con más de veinte puestos nuevos respecto a la edición del año pasado- que el público mostró un «enorme interese» por conocer las diferencias entre los productos y servicios convencionales y los que se expusieron para la venta en Arzúa. Entre otros, además de todo tipo de productos de alimentación, calderas y estufas de biomasa e impresoras 3D que emplean plástico reciclado como soporte.