«Vivir en el centro es lo más cómodo y también lo más caro»

santiago / la voz

SANTIAGO

20 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Dani y Guille llevan cinco y seis años respectivamente viviendo de alquiler en Compostela. Ninguno de los dos vivió el lujo de arrendar en la zona vieja, pero reconocen que sería una bonita experiencia.

Los dos empezaron la carrera viviendo en el Ensanche porque era la zona de más ambiente y en la que tenían más conocidos: «Está todo al lado y hay un montón de establecimientos con ofertas exclusivas para estudiantes, sobre todo menús». Pero con los años, la crisis e ir arrastrando asignaturas supuso el final de un tren de vida que no se podían permitir en sus nuevas circunstancias, así que tras un año apretándose el cinturón, tuvieron claro que lo que tenían que hacer era buscar otra zona en la que vivir con comodidades similares sin vaciar el bolsillo a las primeras de cambio.

Su siguiente hogar fue en Galeras. Un piso mucho más pequeño, envejecido, menos equipado pero claramente más barato, lo que les daba un margen para suplir ciertas carencias y además «aprovechar para hacer un poco de vida». Tras un duro invierno ven que tienen perspectivas diferentes y deciden dejar su aventura juntos. Uno se queda, la proximidad con el casco histórico, su facultad y la mayoría de sus amigos le pueden. El otro siente morriña de la amplitud y comodidad de la primera morada, y aunque sigue con el mismo presupuesto limitado, no le importa recorrer distancias más amplias. El resultado de la búsqueda es un piso en la parte alta de Vite. Grande, bien equipado, mucho más reciente que el anterior y el precio más o menos el mismo, aunque las visitas se redujeron drásticamente, pero el lo tiene claro, «al final no estás tan lejos, sales de casa, te enciendes un cigarro y cuando te das cuenta ya estás en el centro».