Anxo Queiruga recorrió desde la praza da Quintana de Santiago hasta la del Obradoiro, y accedió a esta por las escaleras del arco
09 jun 2015 . Actualizado a las 19:27 h.El presidente de la Confederación Galega de Persoas con Discapacidade (Cogami), Anxo Queiruga, probó con éxito a mediodía en Santiago un nuevo modelo de silla de ruedas que permite salvar escaleras. Partió en esa silla de ruedas, que tiene propulsión eléctrica, de la praza da Quintana, se movió por la praza da Inmaculada, al lado de la catedral, y accedió a la del Obradoiro bajando con la silla por el arco. «Esta cadeira de rodas novidosa funciona como unha cadeira de rodas convencional, pero cobra valor porque é capaz de superar obstáculos, sendo apta para cidades con cascos históricos que, pola súa consideración, están dotadas dun pavimento e dun deseño non sempre aptos para as persoas con mobilidade reducida», explica Cogami.
Este dispositivo puede adquirirse en ortopedias y Cogami aconseja a las personas interesadas que entren el página web de Top Chair, que se encarga de su distribución. Anxo Queiruga explicó que el modelo supone un importante avance, pero debe mejorarse aún para superar más obstáculos. Además, admitió que su costo es elevado y pocas personas con discapacidad pueden permitirse comprarla: una silla de ruedas convencional, como la que él y muchas otras personas utilizan habitualmente cuesta sobre unos 4.000 euros, y este nuevo modelo más del cuádruple. Además, las personas con problemas de movilidad deben asumir otros gastos, como la adaptación de vehículos de motor si quieren usarlos, y que también tiene un coste importante. Sin embargo, estos adelantos permiten una mayor calidad a las personas que los utilizan, indicó.