Acoso escolar y sociedad

Joel Gómez SIN INTENCIÓN

SANTIAGO

12 mar 2016 . Actualizado a las 17:16 h.

En la jornada sobre el acoso escolar organizada ayer por Escolas Católicas, quedó claro que es un problema de toda la sociedad. Las administraciones, los centros educativos y su personal, las familias y por supuesto el colectivo escolar tienen implicación. Pero hay más factores que deben considerarse.

Entre las intervenciones, el exvaledor do Pobo, José Julio Fernández, aludió a la «complejidad del problema» por afectar a menores, resaltó los desencuentros entre instituciones sobre el tema, y destacó cómo detectaron adolescentes que admiten conductas machistas de sus colegas, más propias de hace décadas, que al equipo del Valedor les parecieron «alucinantes»; el pedagogo Xosé M. Suárez Sandomingo enfatizó el interés de la mediación para resolver los conflictos; la psicóloga Olegaria Mosqueda apeló a la necesidad de equipos interdisciplinares; la inspectora Sonia Rama indicó que la Policía Nacional «queremos ser un apoyo para los centros educativos»; o la asesora jurídica de la entidad organizadora, Belén Costa, sostuvo que se detectan situaciones de conflicto o de convivencia, pero es más difícil demostrar el acoso escolar, y en todo caso los protocolos existentes son una ayuda para resolverlo. Y se insistió además en la necesidad de más formación, mejor comunicación, y diálogo.

Son puntos de vista diversos sobre un problema ciertamente complicado. Pero muy serio y doloroso. Hay que evitar que quienes sufren acoso sean solo víctimas de un trato a todas luces injusto; y evidenciar que el acoso tiene costes para quien lo hace, y/o para quien lo consiente.