La Fraternidad del Camino de Santiago crea una lista negra de atentados contra el patrimonio

Margarita Mosteiro Miguel
marga mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

La entidad, que une a expertos de 28 países, tiene previsto ponerla en funcionamiento antes de final de año

16 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Fraternidad Internacional del Camino de Santiago aprobó este fin de semana la creación de una lista negra para denunciar los atentados contra el patrimonio monumental y artístico que se producen a lo largo de las rutas jacobeas. El historiador Miguel Cajigal presidirá la comisión de seguimiento, que contará con otros expertos en patrimonio y en legislación relacionada con la protección del Camino. Cajigal indicó que el objetivo es que la «lista esté en funcionamiento a finales de este año». Con ella se pretende «no solo denunciar los atentados, sino mantener la atención sobre ellos hasta que sean solucionados». El historiador destacó el hecho de que «en muchas ocasiones se publica en prensa una acción contra el patrimonio, pero acaba olvidándose el asunto. La idea es mantenerlo vivo en la lista, y colgado en la página web de la Fraternidad hasta que sea reparado el problema».

La lista negra se nutrirá de las denuncias que los particulares envíen a la Fraternidad, y previo análisis de los expertos y comprobación de la veracidad de la denuncia se subirá a la web. En el listado también se incluirán acciones que merezcan el elogio de los defensores del Camino.

Compostela con 300 kilómetros

Por otro lado, en la reunión de la Fraternidad celebrada este fin de semana en Santiago también se aprobó «seguir insistiendo ante las autoridades civiles y eclesiásticas para la adopción de 300 kilómetros como distancia mínima en la obtención de la Compostela», comentó Luis Menéndez. El directivo de la entidad indicó que esta propuesta tiene como finalidad «reducir la presión sobre el Camino», e insistió en que «el afán cuantificador y puramente economicista está sobresaturando el Camino, perjudicando el verdadero espíritu peregrino y la hospitalidad jacobea».