La fragmentación del ecosistema, otra de las amenazas que pesan sobre el parque natural

La Voz

SOCIEDAD

08 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El bosque atlántico ocupa el 30% de la superficie de las 9.000 hectáreas de terreno que conforman el parque natural de las Fragas do Eume, que se extienden a lo largo de cinco municipios (Cabanas, A Capela, As Pontes, Monfero y Pontedeume). Pero las masas arbóreas conformadas por castaños, abedules, fresnos, alisos, avellanos, sauces y, principalmente, robles no conforman un espacio único. Más bien al contrario, están fragmentadas. Y esta pérdida de conectividad biológica entre hábitats similares es lo que constituye otro de los peligros que ha contribuido en los últimos cincuenta años a la pérdida de la biodiversidad del entorno.

En 1957, el 86% del bosque estaba comprimido prácticamente en un único fragmento. Ahora, el terreno se ha fragmentado en 137 espacios aislados, la mayoría de los cuales tiene menos de una hectáreas de superficie.

Solo tres manchas superan las 200 hectáreas. La mayor, de 1.004 hectáreas, está situada al final del valle del Eume y ocupa un 11% del espacio protegido. Pero por sí sola constituye el mejor ejemplo de bosque costero en Galicia, además de ser uno de los mejor conservados de toda Europa. Esta singularidad es la que hace necesario que la Administración refuerce las medidas de conservación, según los autores del estudio. «Hay que mantener los bosques originales y fomentar la conectividad biológica para evitar la fragmentación», explica el biólogo Alberto L. Teixido, uno de los autores de la investigación y natural de Pontedeume.