El «Dar Mlodziezy», de 108 metros, atrajo todas las miradas
10 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El puerto de A Coruña está lleno de colorido, de banderas. Hoy es la fecha límite para arribar a esta ciudad, pero durante la jornada de ayer fueron llegando algunos de los grandes veleros que participan en la Tall Ships Races. A eso de las nueve de la noche, cuando la goleta gallega Juan de Lángara atracó entre aplausos y gritos de júbilo del numeroso público que se acercó a recibirla, ya habían entrado (algunos por la mañana) el Pelican of London, el Dar Mlodziezy -de 108.8 metros de eslora-, el Fryderyk Chopin o el Kapitan Borchard. Comienzan ahora varias jornadas en las que las tripulaciones serán la clave: hoy, a las 21.00 horas, habrá cena de capitanes y, mañana, a las 20.30, fiesta de tripulantes.
Sin viento y mar calmado. Ayer fue el último día de navegación para los jóvenes que iban a bordo de la Juan de Lángara, la única embarcación gallega de las 47 participantes. Lucía Veiga, Elena Rodríguez, Guille Varela, Carmen Villar, Héctor Fernández y Adrián Fernández -con la correspondiente tripulación profesional- se empaparon de nociones de navegación desde que salieron de Cádiz el 29 de julio. A mediodía, tras haber partido de Corme, reconocían a La Voz, con la que compartieron sus últimas tres etapas, que sentían «un montón de pena» por la finalización de la regata.
Aprendieron «lo duro que es navegar», el papel del timón o de las velas, pero también «lo que es cocinar y limpiar lo de doce, salir de la cama y estar en un minuto en cubierta o hacer guardias por la noche». La última jornada -33 millas hasta A Coruña- se vivió a lo grande. Desde el momento de entrar al barco fueron una familia. Todos repetirían. Y esa era la idea.