Nuria Mas: «Nos fijamos en lo que cuesta la investigación, no en todo lo que aporta»
SOCIEDAD
Nuria Mas, profesora experta en economía de la salud, inauguró ayer en la Fundación Novacaixagalicia de A Coruña el foro Repensar la sanidad, en el que se pretende analizar y proponer alternativas a un sistema sanitario tan necesario como atacado por la crisis y los recortes.
-¿Cómo ve el futuro del sistema sanitario?
-Yo soy optimista. Hay una cosa cierta, a medida que un país se hace más rico -y aquí confiamos en que España volverá a crecer-, gasta una proporción mayor de PIB en sanidad, independientemente de que hablemos de sanidad pública o privada. El deseo de los ciudadanos de los países ricos es invertir menos en otras cosas y más en sanidad. Lo que sí es importante es que haya más presión para que ese dinero se gaste bien, de la manera más eficientemente posible. Ahí está la clave, en mejorar la eficiencia del sistema.
-Así dicho, parece sencillo...
-Pero implica un cambio de mentalidad en toda regla. El sistema actual está obsoleto en el sentido en que está diseñado para atender enfermedades agudas, y ahora, por suerte, ya no nos morimos de esto, sino de enfermedades crónicas que son las que representan un 70 % o un 80% del gasto sanitario. Por eso la estructura actual no es sostenible.
-Deriva del envejecimiento de la población.
-Efectivamente, cada vez vivimos más. Pero también influye lo que llamamos tecnologías médicas, que no es comprar nuevo material, sino todos los avances que nos permiten sobrevivir a enfermedades de las que antes nos moríamos. Y esto requiere inversión, no solo porque la tecnología sea cara, sino porque nos permite sobrevivir, y eso es un gasto. Al enfermo crónico hay que hacerle un seguimiento integral por parte de los distintos ámbitos del sistema sanitario.
-¿Qué papel juega la investigación?
-Sin duda es muy importante, sobre todo hablando de eficiencia, porque a menudo nos fijamos en lo que nos cuesta, pero no en lo que nos aporta.
-¿Cómo llegamos a esa excelencia?
-Debemos buscar datos, compararnos con otros países, una comunidad autónoma con otra, hospital con hospital. Ver lo que funciona y lo que no y estar dispuestos a cambiar, porque ahora las necesidades son diferentes.