La mujer dio a luz a sus dos hijos en 1972. Solo los vio una vez a través de un cristal. La niña falleció supuestamente a los 8 días y el niño a los 13
30 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Un matrimonio de Jerez de la Frontera (Cádiz) acudirá al Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo después de que los tribunales españoles hayan rechazado investigar por prescripción el presunto robo de sus hijos mellizos, que nacieron en el hospital Primo de Rivera de Jerez en 1972.
Los padres, Luisa y Paco, presentaron su primera denuncia en el 2011 en un juzgado jerezano que la archivó por prescripción. El mismo camino siguió la apelación que presentaron en la Audiencia provincial de Cádiz y finalmente el Constitucional ni siquiera la ha admitido a trámite.
Según la Asociación SOS Bebés Robados de Cádiz, el de Luisa y Paco es uno de los casos «más documentados» que poseen y, pese a «las contradicciones que aparecen en los documentos» y a que «diferentes profesionales fueron imputados», no se ha llevado a cabo investigación alguna de lo que sucedió con sus hijos.
Por ello los abogados de la Asociación, Luis Montero y Alberto Prián, han interpuesto una denuncia contra el Estado Español «por considerar que ha sido vulnerado su Derecho a la Tutela Judicial efectiva recogido en el artículo 6 y 13 del Convenio Europeo para la protección los de Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales».
Estrasburgo podría, dice la asociación, abrir una puerta» que hoy por hoy está «cerrada» en España para que se investiguen los casos de bebés robados.
Tras un cristal
Luisa dio a luz a sus mellizos, niños y niña, en febrero de 1972, a los que vio una sola vez a través de un cristal. La niña falleció supuestamente a los 8 días y el niño a los 13. Las causas de las muertes se contradicen en varios documentos ya que en uno pone neumonía, en otro colitis y en otro prematuriedad, e incluso existe un documento que señala que al niño se le dieron medicamentos después de estar fallecido.
También se deja constancia de que se les dio el pecho cuando Luisa recibió medicación para no hacerlo desde el primer momento y en el certificado de defunción aparece un intento de imitación de la firma del padre.