Asturias y Andalucía no realizarán la prueba, en Cataluña hay 30 escuelas insumisas, en Aragón se filtró el examen y hubo movilizaciones en Madrid
06 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Al igual que ocurrió en su momento con Educación para la Ciudadanía, y de una forma más contundente en la escuela pública, la realización de la reválida de 3.º de primaria ha nacido rodeada de problemas y augura un mayo cargado de tensión para ministerio y Gobierno. Hay tres niveles de insumisión ante esta evaluación diagnóstica que comenzó ayer: en algunas comunidades autónomas, en colegios y por parte de las APA.
El primer nivel, el más grave al tratarse de una ley estatal, está protagonizado por Asturias y Andalucía. Aunque las cinco comunidades no gobernadas por el PP (Andalucía, Asturias, Canarias, Cataluña y País Vasco) están en contra de la norma, solo el Principado y Andalucía esquivan las pruebas. La consejera de Educación del Principado, Ana González, echa mano de un matiz legal para evitar realizar la prueba esta primavera: la Lomce aún no se ha implantado en su totalidad -solo en primaria se acabará de incorporar el curso que viene, y hasta el 2017/18 no estará plenamente en vigor en todos los niveles-, y por tanto la evaluación aún no es obligatorio el examen. Andalucía, por su parte, opta por una evaluación continua y global de sus alumnos, a los que evitará el estrés de una prueba que dura al menos dos días.
Mientras las dos comunidades citadas se enfrentan frontalmente al ministerio, en cuatro autonomías ya se ha celebrado la prueba: además de Ceuta y Melilla (regidas por el Estado), el lunes comenzó en Cataluña y Navarra, y ayer empezó en Madrid y Aragón. En todos los territorios hubo problemas: Cataluña ha sido la más combativa, ya que se ha creado la denominada Red de Escuelas Insumisas a la Lomce, de la que forman parte unos 30 centros de Barcelona, Llobregat, Maresme o Gerona, entre otros; los padres de estos colegios han realizado sentadas y actos de protesta ante los centros a las horas de los exámenes. Lo mismo ocurrió ayer en Madrid en algunos colegios, movilización organizada por las APA de los centros públicos (FAPA en Madrid) mientras los claustros realizaban las pruebas, ya que el colegio no puede objetar.
En Navarra la insumisión ha sido más puntual, por parte de familias en diferentes colegios no organizados. Y en Aragón lo que se ha hecho es filtrar el examen, que se colgó en una web denominada «boicot Lomce» para que se invalidasen los resultados.
En el País Vasco, aunque todavía no se han realizado las pruebas, las APA de varios centros anunciaron su rechazo al examen, y la agrupación vasca de familias de la red pública, Ehige, también se opone a este examen que tiene tres áreas -castellano, idioma propio y matemáticas- y necesita entre dos y cuatro días para llevarse a cabo.
Fechas en Galicia: 27 y 28 de mayo
En el colegio. Son 22.000 los niños gallegos que harán las evaluaciones de 3.º de primaria en sus colegios.
La plataforma Galega en Defensa do Ensino pide la objeción
La Plataforma Galega en Defensa do Ensino se suma a las movilizaciones contra la evaluación, y anima a los padres a no enviar a sus hijos al colegio los días 27 y 28, cuando se realicen las pruebas en la comunidad, además de convocar para ese día (27) una concentración ante la consellería a las 11.30 horas. Son muchas las razones esgrimidas contra la prueba: es «unha aberración desde o punto de vista pedagóxico someter o alumnado de 8 anos a unha presión innecesaria» de un examen uniformado que menosprecia «a adquisición doutras competencias, destrezas e habilidades do campo artístico, musical e físico»; además, desprecia la evaluación continua, desconfía del profesorado, fomenta la competitividad y los ránkings, y supone un dispendio económico.
Igual que la Plataforma, la asociación de padres de colegios públicos Ceapa Galicia anunció recientemente su insumisión frente al examen, como ha hecho Ceapa a nivel español.
Educación informa de la prueba
Por su parte, la Consellería de Educación concluyó ayer una jornada informativa con los inspectores «de xeito que actúen como vía de comunicación cos centros para a aplicación da proba de avaliación individualizada de 3.º de primaria». Los inspectores son «a canle que teñen os directores e profesores para resolver calquera dúbida na execución desta proba», que, recuerda la Xunta, va en la misma línea que la que se realizó en los últimos cinco años en 4.º, aunque en esta ocasión se incluye un informe individual de cada alumno.