Pepa Flores: de Marisol al anonimato de un retiro voluntario que ya dura 40 años

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Pepa Flores en un fotograma de la película «Las cuatro bodas de Marisol»
Pepa Flores en un fotograma de la película «Las cuatro bodas de Marisol» Archivo

El programa «Lazos de sangre» (La 1, 22.35 horas) se centra este martes en la icónica figura de la artista malagueña, hoy convertida en mito, que en 1985 decidió renunciar a la fama y vivir siendo libre retirada de la vida pública

23 abr 2024 . Actualizado a las 13:03 h.

«Antes yo no me quería nada, ahora sí me quiero», explicaba Pepa Flores (Málaga, 1948) hace ya más de veinte años en una entrevista. En los 60 fue toda una estrella del cine en España, niña prodigio que representó la imagen oficial del franquismo y acabó convertida en icono de la Transición, soportó durante 25 años del peso de la fama y la sobreexposición. Pero en 1985 se deshizo de Marisol, escapó de la gloria y del dinero, y optó por vivir siendo libre, de forma anónima, tomando sus propias decisiones. A sus 75 años, Pepa Flores lleva casi 40 apartada del foco mediático. Y aunque le han ofrecido ofertas millonarias, la malagueña no está dispuesta a revivir aquel infierno.

Tampoco el reconocimiento y el cariño de su público han podido sacarla de ese retiro voluntario. Celosa de su intimidad, ni siquiera recogió el Goya de Honor 2020 «por sus inolvidables interpretaciones y por ser una de las actrices más queridas por el gran público». Fueron sus tres hijas, María, Celia y Tamara, quienes recibieron el galardón en su nombre. «Querida mamá, desde ese lugar en calma que has conseguido y tanto te ha costado, esta profesión te entrega este premio. Querida Pepita, disfrútalo, es para ti».

Este martes, Lazos de sangre (La 1, 22.35 horas) se centra en la icónica figura de la malagueña. De Marisol a Pepa Flores recuerda, con la ayuda de su hija Celia y su hermana Vicky, cómo fueron aquellos años para una niña que solo tenía 12 años cuando alcanzó la fama. Este documental ya había sido emitido durante la segunda temporada de Lazos de Sangre en el año 2019, cuando estaba al frente Boris Izaguirre. La novedad de esta noche será el debate moderado por Jordi González sobre la figura de la artista.

 El programa repasará la dura infancia de Pepa Flores, alejada de sus padres, su relación con la familia Goyanes, sus dos matrimonios, la figura de Antonio Gades, padre de sus hijas, el desnudo de Interviú, su lado más comprometido y revolucionario, y el presente de la actriz, convertida en mito.

«Un rayo de luz»

Pepa Flores nació en el seno de una familia muy humilde en 1948, en una corrala malagueña. Fue descubierta a los 11 años por el productor Manuel Goyanes durante una actuación en un programa de televisión. Viendo el potencial de la niña, Goyanes se la llevó a vivir a su casa de Madrid. Clases de inglés, de baile, de dicción... le aclararon el pelo e incluso le operaron la nariz. Nacía Marisol, aquella niña rubia, angelical y pizpireta que enamoró al público al instante. En 1960 se estrenó su primera película, Un rayo de luz, a la que siguieron muchas más: Ha llegado un ángel (1961), Tómbola (1962), Marisol rumbo a Río (1963)... Una película al año, un éxito tras otro. Tenía 15 años cuando el ajetreo causado por las largas jornadas laborales, tantos rodajes, anuncios y viajes le causaron una úlcera debido al estrés.

En 1969, a los 21 años, se casó con Carlos Goyanes, hijo de su descubridor y productor. Quería cambiar de registro, alejarse de la imagen infantil a la que vivía ligada. En ese paso a la madurez demostró su capacidad como actriz dramática en producciones dirigidas por Juan Antonio Bardem, Carlos Saura y Mario Camus, aunque no siempre respaldada por aquel público que seguía adorando a la niña Marisol. 

De Goyanes se separó tres años después de la mediática boda, en 1972. Y solo un año después conoció a Antonio Gades, con el que tuvo tres hijas. En 1982 Flores y Gades se casaron en una boda en Cuba, en la que los padrinos fueron Fidel Castro y Alicia Alonso. Junto a Gades, se afilió al Partido Comunista de España y, posteriormente, al Partido Comunista de los Pueblos de España.Empezó los años 70 trabajando con Juan Antonio Bardem (La corrupción de Chris Miller y El poder del deseo) y con Mario Camus (Los días del pasado, una historia de soledad y miedo en la que encarnó a una maestra andaluza que lucha por reencontrarse con su compañero sentimental, miembro del maquis antifranquista). En Los días del pasado compartió gran pantalla con su pareja y padre de sus tres hijas, Antonio Gades, con el que también colaboró en Bodas de sangre y Carmen, firmadas por Carlos Saura. Caso cerrado, en cuyo reparto figura otro malagueño que en ese momento empezaba a resaltar, Antonio Banderas, es el último filme de la protagonista de La chica del Molino Rojo y de la miniserie Proceso a Mariana Pineda, en cuyo currículo también figura la obra de teatro Quédate a desayunar, junto a José María Rodero.

Marisol, que llegó a aparecer en El show de Ed Sullivan, grabó más de 500 canciones interpretadas en varios idiomas e hizo su último disco en 1983. También representó a España en el primer Festival OTI, donde logró el tercer puesto con el tema Niña y su última película en 1985.

Vida anónima en Málaga

Tenía tan solo 38 años cuando decidió abandonar su carrera. Pepa Flores regresó a Málaga con sus tres hijas tras separarse de Antonio Gades. Cuando el bailarín se marchó, ella regresó a su Málaga natal, más cerca de sus padres y sus hermanos, de dónde había salido siendo una niña para volver en contadas ocasiones. Allí estableció su cuartel general, donde encontró la paz y la tranquilidad para intentar ser anónima. En Málaga conoció a su actual pareja, Massimo Stecchini. Junto a él, Pepa Flores ha encontrado la estabilidad que tanto añoraba, y los dos disfrutan de los nietos y de los largos paseos, donde ya nadie la para por la calle y, la mayoría de sus vecinos, respetan su tan anhelado anonimato.