La fiesta del fútbol vuelve a Riazor

Pedro José Barreiros Pereira
pedro barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

Alineaciones Deportivo-Sporting
La Voz

El Dépor aspira a refrendar como local su buen arranque en el duelo de rivalidad contra el Sporting

20 sep 2015 . Actualizado a las 11:54 h.

Llega el derbi del Cantábrico. El Dépor y el Sporting reabren Riazor, donde no había Liga desde hace un mes, allá por el 22 de agosto cuando jugó la primera jornada contra la Real. Por fin la afición podrá comprobar con sus propios ojos el buen momento de su equipo: invicto y competitivo, defensivamente serio, al tiempo que imaginativo en ataque.

Vuelve a casa para celebrar una jornada de fiesta grande, con el graderío al filo de los 30.000 espectadores, gran presencia de aficionados visitantes desplazados desde la vecina Gijón y dos equipos sobre el césped que se saben condenados a un final de temporada trepidante y aspirantes a las mismas plazas de permanencia. Hasta los banquillos parecerán de gala, con Víctor y Abelardo, futbolistas de dorada trayectoria hasta hace pocos años, ahora en sus inicios como entrenadores de Primera.

El balón rodará con la rivalidad a flor de piel, reeditada en tantos duelos históricos y que encuentra precedente más cercano hace dos temporadas en Segunda División, cuando la última carga del Dépor con Fabricio unido al ataque y Toché como postrero rematador le permitió sumar un punto frente a un Sporting que tenía el partido en el bolsillo. De vuelta al presente, intensidad y emoción se dan por descontadas en un duelo muy distinto a los que los coruñeses acaban de cubrir con nota. Ni contra la Real ni frente al Valencia ni en Vallecas se sintieron con la obligación de llevar el peso de sus respectivos partidos. Basaron su éxito, indiscutible y feliz, en la sorpresa del que espera sufrimiento, pero le premian con caramelos. Esta tarde la exigencia se revela mayor. Riazor aguarda a sus futbolistas con la boca dulce de buen juego y puntos en el choque más parecido a lo que será el incomparable derbi gallego del próximo mes de noviembre.

Sin cambios

Quizá por esta trascendencia no se prevén grandes cambios en el once de Víctor, quien parece decidido a que la hinchada se aprenda de carrerilla el elenco de ídolos que la hacen soñar en este arranque de campeonato. Las variaciones no afectarían a la que se ha revelado como columna vertebral del equipo, con Sidnei, el tridente del centro del campo (Mosquera, Borges y Fayçal), así como los protagonistas ofensivos Lucas y Luis Alberto como intocables gracias al buen rendimiento demostrado. Con la baja por decisión técnica de Riera, a estos se les podrán añadir el afán asociativo de Luisinho, el impulso de Cartabia (inédito contra el Rayo) y el estreno de Jonathan ante su nueva afición. No faltará, pues hasta ahora se ha repetido, el carácter competitivo, solidario y sin fisuras que el entrenador ha inculcado a sus futbolistas y que pretende convertirse en sello de identidad.

El Sporting se caracteriza precisamente por unas virtudes similares. Con Canella de vuelta a A Coruña, esta vez de rojiblanco, Abelardo dispone de un equipo sin grandes nombres (más allá del punta Sanabria, incluido en esa selección de delanteros que el Dépor meditó el curso pasado, y la perla del Barça, el mediapunta Halilovic) decidido a marcar un ritmo alto. Estos caminos le llevaron hacia el ascenso de categoría y ahora aspiran a que les guíen a la permanencia. Riazor ultima la fiesta.