Un fantástico gol de Lucas Pérez en el tramo final de partido permitió al Deportivo sumar un punto ante el Atlético en un partido que parecía abocado a la derrota
31 oct 2015 . Actualizado a las 19:53 h.El Deportivo se encontró a sí mismo ante el Atlético de Madrid tras logar un meritorio empate en Riazor (1-1) en un partido que parecía abocado a la derrota. Un gran gol de Tiago en la primera parte puso el encuentro encarrilado para el Atlético, pero Lucas Pérez en la segunda parte, igualó la contienda en el tramo final.
Desde el primer minuto, el Atlético de Madrid llevó las riendas del choque. Dominio de la posesión y de los espacios frente a un Deportivo ordenado, en su versión más sólida, que con un gran despliegue táctico minimizó el enorme potencial colchonero durante gran parte del primer acto.
La verticalidad de Griezmann o Ferreira Carrasco la minimizó el conjunto de Víctor Sánchez con muchas ayudas, especialmente de la línea de tres mediapuntas; Fajr, Jonás y Cartabia que se vaciaron en las ayudas al centro del campo, lo que posibilitó la desconexión ofensiva del Atlético.
Con sobriedad en defensa pero con falto de efectivos en ataque. El Deportivo fió todo su arsenal ofensivo en la primera parte a la velocidad de Lucas Pérez, que se fajó con Giménez y Godín, con escasa fortuna. Para ir a una guerra, los dos centrales uruguayos son siempre un mal enemigo. Abusó el Dépor de los balones en largo hacia Lucas, que acabó desquiciado el primer acto pese a su derroche físico.
Las ocasiones no llegaban, el Atlético dominaba y el Dépor se defendía bien, sin pasar apuros, pero siempre en el alambre. Los dos equipos parecían cómodos en ese escenario, pero llegó una jugada aislada que acabaría por cambiar el partido. Un centro de Carrasco desde la izquierda lo despejó Sidnei, con la mala fortuna que el balón golpeó en la cara de Fajr, el esférico le cayó franco a Tiago en la frontal, el portugués con un golpeo seco y de mucha calidad, colocó el balón en la red, pegado al palo de Lux, que no puedo hacer nada.
Sin avisos, sin ocasiones previas y quizá también sin merecimientos, el Atlético asestaba un duro golpe al deportivismo. Era el tramo final de la primera parte y tras el gol, los locales empezaron a variar el plan conservador y adelantaron líneas y los colchoneros estuvieron muy cerca de aprovecharlo, con un Carrasco espectacular, incisivo y vertical que trajo de cabeza a Laure por la banda izquierda.
A siete minutos para el descanso Godín remataba de cabeza en el área pequeña a la salida de un córner y el esférico se marchaba al palo, Apenas tres minutos después una buena jugada por banda derecha de Juanfran acabó con un centro al punto de penalti que Carrasco envió por encima del larguero. El Dépor había perdido la fiabilidad defensiva y el Atlético crecía y llamaba a la puerta del segundo gol, así se llegaba al descanso.
Otro Dépor tras el descanso
Tras el intermedio el Deportivo fue otro. En apenas cuatro minutos los blanquiazules ya habían creado más peligro que en todo el primer acto. Primero con un fenomenal centro de Jonás Gutiérrez desde la izquierda al que no llegó Lucas por centímetros y, posteriormente, con sendos disparos de Fede Cartabia que atajó con sobriedad Oblak. El extremo argentino, que apenas había participado en la primera parte, era el principal recurso ofensivo del Dépor a través de su habilidad y verticalidad.
Sin embargo, el Atlético se defendía con agresividad y sacrificio y al Dépor le costaba desequilibrar el tupido entramado defensivo diseñado por Simeone. Más allá de las jugadas aisladas de Fede Cartabia, los blanquiazules no eran capaces de hacer daño.
Sin embargo, a menos de un cuarto de hora para el final, un error de Giménez, que perdió el balón en su propia área lo aprovechó Lucas Pérez. No estaba acertado en el partido el coruñés, errático, con la suerte de espaldas pero siempre batallador. Le robó el balón al central uruguayo y en el mano a mano ante Oblak, donde otros tiembaln y se le nublan las ideas, pisó el balón con la zurda para alejarse del guardameta y definió con la derecha para empatar el partido.
Como el Atlético en el primer tiempo, el Deportivo empataba cuando nada lo hacía prever, cuando los acontecimientos apuntaban a otra dirección. El gol variaba tanto el partido que el Dépor ya no se conformaba con el empate, Riazor pedía más y la situación invitaba a venirse arriba. Y a punto estuvo de culminar el Deportivo la hazaña.
A tres minutos para el final, Fayçal Fajr se inventó un descomunal disparo desde la frontal, con la diestra, que superó la estirada de Oblak y se estrello en la cruceta de la meta del eslovaco. Se acababa así el partido, en el que la fe del Deportivo le llevó a sumar un punto inesperado ante uno de los grandes del campeonato. Un punto más en lo deportivo pero varios conseguidos en lo anímico. Y una vez más con Lucas Pérez haciéndose grande en Riazor para agigantar al Dépor. Incluso en su partido más flojo, en el que menos acertado estaba, cuando es fácil desistir, al final su fe y su amor propio tuvo su recompensa. Esa fe a la que se agarra el deportivismo esta temporada y que tiene un nombre; Lucas Pérez.
Ficha técnica:
1 - Deportivo de La Coruña: Lux; Laure (Juanfran, min.75), Lopo, Sidnei, Navarro; Celso Borges, Mosquera; Fede Cartabia, Fayçal Fajr, Jonás Gutiérrez (Luis Alberto, min.69); y Lucas Pérez.
1 - Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe; Koke, Gabi, Tiago (Torres, min.82), Yannick Carrasco (Correa, min.61); Griezmann y Jackson Martínez (Saúl Ñíguez, min.71).
Goles: 0-1, min.34: Tiago. 1-1, min.77: Lucas Pérez.
Árbitro: Pérez Montero, del colegio andaluz. Mostró amarilla a Fayçal Fajr (min.15) y Fede Cartabia (min.90), por parte del Deportivo.
Incidencias: Partido de la décima jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio de Riazor ante 24.608 aficionados.