El equipo de Gaizka Garitano acabó la pretemporada sin encajar goles de córner ni faltas laterales y, por el contrario, exhibió buenas maneras ofensivas a balón parado
15 ago 2016 . Actualizado a las 12:10 h.Se acabaron las pruebas. El Dépor empieza esta semana a preparar el primer partido de Liga, que disputará el viernes (22 horas, canales digitales) contra el Eibar en Riazor con un balance positivo en lo que a la pretemporada se refiere. Seis victorias, dos empates y solo dos derrotas son el bagaje con el que la escuadra que prepara Gaizka Garitano inicia la temporada. Pero más allá de los resultados, el Dépor llega a este primer partido de Liga como un equipo sólido, bien trabajado desde atrás hacia delante, y en el que la estrategia parece haber dejado de ser esa fuga por la que llegan las sangrías goleadoras.
En los diez encuentros disputados este verano, los coruñeses han encajado solo siete goles. Y de ellos, ninguno ha sido fruto de una acción a balón parado que no fuera penalti. Por el contrario, en ataque, aun sin haber mostrado excesivo acierto en esas acciones de estrategia, al equipo de Garitano se le está viendo muy trabajado en estas lides y, aunque le falta rodaje, ha exhibido buenas maneras en la mayoría de los partidos.
De momento, solo marcó frente al Verín. Los tres tantos fueron tras un saque de esquina y solo uno de ellos de cabeza. Sin embargo, en el resto de encuentros ha mostrado una amalgama de jugadas que hacen atisbar esperanza. «Creemos que el balón parado es una faceta muy importante en el juego y esta pretemporada estamos bastante satisfechos de cómo nos ha ido. No hemos encajado ningún gol y, en cambio, sí que hemos hecho algunos», reflexionaba hace unos días Gaizka Garitano en el programa de Radiovoz La Voz del Deporte.
Tal es la importancia que le da a esta faceta que esta misma semana tiene previsto organizar dos entrenamientos a puerta cerrada para trabajar diferentes situaciones: tanto ofensivas como defensivas. La primera de estas sesiones tendrá lugar el próximo jueves, mientras que la segunda, ya en el estadio municipal de Riazor, tendrá lugar la misma mañana del encuentro. En el aspecto de contención, José Luis Ribera será el encargado esta semana de trocear los vídeos del Eibar y tratar de encontrar los puntos fuertes del conjunto armero para que, luego en el campo, sean Gaizka Garitano y Patxi Ferreira los que coloquen a la zaga deportivista para contrarrestar el ataque visitante.
El entrenador vasco quiere evitar la sangría que sufrió el Dépor el año pasado, sobre todo, cuando había un saque de esquina. Fue el equipo de Primera que más goles encajó de esta manera. Un total de 13 y uno más de falta frontal (Arribas en propia puerta). Celta, Madrid y Getafe lo siguieron en esta clasificación con ocho recibidos. Hasta mediada la temporada, Víctor apostó por defender estas acciones dejando descolgados dos o tres futbolistas para tratar de lanzar la contra con rapidez. No consiguió sacar beneficio de esto y, por el contrario, encajó muchos tantos. Tras cambiar la táctica siguió recibiendo goles sin piedad.
Y mientras el laboratorio de Ribera analiza la manera de defender el balón parado del rival, Patxi Ferreira lleva toda la pretemporada diseñando una serie de acciones que poco a poco van asimilando los futbolistas blanquiazules. También es objetivo prioritario mejorar los números de la pasada temporada, cuando la escuadra entonces dirigida por Víctor Sánchez del Amo solo consiguió perforar la meta contraria tres veces gracias a acciones ensayadas. De momento, se ve variedad. A partir del viernes, toca que haya eficacia.