La velocidad real de descarga puede llegar a ser un 64 % menor que la publicitada
25 mar 2014 . Actualizado a las 18:22 h.España vuelve un año más a situarse entre los países con precios más altos para el acceso a internet de banda ancha. En concreto, los españoles son los segundos ciudadanos europeos a los que el acceso a la red les supone un gasto mayor (la oferta más barata cuesta alrededor de los 38,70 euros al mes).
«Los precios de las conexiones más comunes de banda ancha pueden llegar a ser hasta cuatro veces más altos en algunos estados miembros, incluso tomando en consideración el poder adquisitivo», explican desde la Comisión Europea, quienes añaden que los usuarios europeos están expuestos a una verdadera lotería geográfica en lo que respecta al precio, la velocidad y la oferta de este tipo de servicios.
El contraste de precios es muy llamativo. Y es que en Lituania el acceso a la banda ancha más barato se puede adquirir por unos 10,30 euros, mientras que en Chipre el mismo servicio puede ascender hasta los 46,20 euros.
Polonia y Croacia presentan la banda de precios nacionales más amplia. En el primero se puede adquirir un servicio de este tipo por entre 20 y 140 euros, mientras que en el segundo la horquilla va desde los 30 hasta los 121 euros. «No existe un mercado único de Internet, y eso tiene que cambiar. Nada justifica que una persona tenga que pagar más de cuatro veces más que otra en Europa por la misma banda ancha», asegura la vicepresidenta de la Comisión Europea, Neelie Kroes.
Además, un estudio europeo ha revelado que el 66 % de los ciudadanos no sabe qué velocidad de Internet ha contratado: «Después de efectuar más de 7.000 millones de mediciones de las conexiones a Internet de casi 10.000 voluntarios, pudimos constatar que la velocidad real de descarga puede llegar a ser un 64 % menor que la publicitada».