Desarrollan con tecnología láser un coche que pesa un 10 % menos

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO /LA VOZ

VIGO

Antoine Riquelme, de Gestamp
Antoine Riquelme, de Gestamp

La empresa con fábrica en O Porriño busca en Vigo socios para impulsar nuevos proyectos en la automoción

23 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La multinacional Gestamp está desarrollando un coche más ligero gracias al láser de última generación. Según ha explicado en el Club Financiero Antoine Riquelme, investigador francés de origen español, «Gestamp es innovador en la estampación en caliente». El empleo de sofisticados y precisos láser permite a la empresa realizar soldaduras de chapas de distinto grosor. Así se consigue reducir el peso del coche hasta un 10 % «garantizando la misma resistencia y seguridad», según señala Riquelme, que trabaja en el centro de I-D-i de la multinacional en España, que tiene una fábrica en O Porriño.

Riqueleme explica que la empresa, que fabrica piezas para automóviles, trabaja con acero al boro con una resistencia de 600 millones pascales. Con la aplicación la estampación en caliente la resistencia del vehículo sube a 1.500 millones de pascales. (La presión que ejerce una persona pisando sobre el suelo es de unos 15.000 pascales).

Con la reducción de peso, el coche consume menos combustible y se reducen las emisiones a la atmósfera. Sin embargo la seguridad se mantiene gracias a la tecnología y los materiales avanzados que se utilizan. «Los impactos son absorbidos por el parachoques y los largueros laterales y, en caso de colisión, el motor no entra dentro del habitáculo», dice el investigador. Riquelme es uno de los expertos que participa en el foro sobre tecnología láser organizado por el Centro Tecnológico Aimen, situado en O Porriño, y señala que las jornadas constituyen una «oportunidad para encontrar socios para nuevos proyectos». Aimen coordina el consorcio europeo que desarrolla el proyecto de investigación Alas, que tiene por objetivo crear un innovador cabezal láser con la capacidad de adaptarse automáticamente a las características geométricas de las piezas. Ello permitirá repararlas íntegramente. El consorcio está integrado por ocho entidades, cinco empresas y tres centros de investigación procedentes de España, Alemania, Bélgica, Eslovenia y República Checa. Cuesta 1,4 millones de euros. Aimen lo presentará en Essen en el próximo mes de julio.