El debate sobre los plazos del nuevo hospital es tan viejo como las obras. Los trabajos debían durar 31 meses, pero el día en que empezaron, en el 2011, el Sergas le concedió a la constructora un aumento del plazo de tres meses. No lo hizo público. A finales de julio del año pasado la edificación detuvo su ritmo de golpe. En los últimos meses ha continuado al mínimo. Sin embargo, la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, aseguró ayer en su visita al Xeral que «los plazos se mantienen». Es decir: en abril del 2014 estará terminado el hospital y a finales de año se abrirá.
Eso sí, la conselleira matizó. Por una parte, reconoció que la unión de empresas (Acciona, Puentes, Altair, Concessia y Obras Caminos y Asfaltos) no consigue créditos por la suspensión de pagos de la ourensana OCA. Advirtió también que ahora esta empresa está regida por un administrador concursal, «que tiene que hacer su trabajo». Señaló que «no hay ningún problema con los financiadores». Indicó que aún quedan «unos meses de holgura» para cumplir los plazos. Pero, sobre todo, reconoció que cuando los problemas de financiación se hayan resuelto, «habrá que volver a sentarnos con ellos [el Sergas y la UTE]» para hablar de los plazos.
Es la primera vez que, aunque sea de manera indirecta, la Xunta reconoce lo que en el entorno médico de los hospitales públicos de Vigo ya dan por hecho: que habrá un desfase en el plazo.
También en el Parlamento gallego se debatió ayer sobre los plazos del nuevo hospital. «Ou se paralizan as obras ou o Goberno terá que avalar con diñeiro público a empresas privadas para que lles dean crédito privado», reclamó el líder del PSdeG, Pachi Vázquez, a Núñez Feijoo. El presidente de la Xunta respondió que hay 150 personas trabajando, que su Gobierno «tutelará» las obras y que «los problemas de las empresas privadas deben resolverlos ellas, hasta aquí podríamos llegar».
Quejas de los médicos
Unos 350 facultativos de los hospitales públicos de Vigo han firmado una carta contra los recortes en sanidad que, aseguran, en Vigo se notan más. A la conselleira de Sanidade se le preguntó ayer por esa carta y lamentó que se hiciera pública antes de «hablarlo a nivel interno».
Una de las denuncias de esa carta decía que la lista de espera se ha incrementado en 8.500 personas en el área de Vigo en cuatro años, unos datos que el Sergas no reconoce como oficiales. De hecho, Mosquera negó que las listas de espera hayan crecido, aseguró que ha ordenado al gerente del Área Sanitaria, Mario González, que trabaje para reducir esa lista, y que en prioridad 1 -las enfermedades más graves, que se deben operar en menos de un mes- se están cumpliendo los plazos aunque en prioridad 2 «hay más dificultades».
La consellería se sentará con la constructora cuando despeje
la financiación
Feijoo dice al Parlamento que la concesionaria debe resolver
sus problemas