Las demandas de preferentes se verán encima de un bar al no haber sitio en los juzgados

El despacho de la magistrada especial que examinará miles de demandas de los afectados por las participaciones preferentes de Vigo y O Val Miñor está situado sobre una cafetería, en el número 2 de la Travesía Coruña, a 300 metros de los juzgados de la calle Lalín. La oficina solo tramitará los expedientes ya que la jueza se desplazará a celebrar los juicios a aquellas salas que no usen el resto de los juzgados civiles. El otro tribunal de este tipo que hay en Galicia fue establecido en un edificio judicial de A Coruña.

La falta de superficie libre de los dos edificios de los juzgados de Vigo obligó a la Xunta a alquilar un local de oficinas vacío en el primer piso de un edificio que hace esquina con la calle Coruña, a 500 metros de la plaza de América. Los litigantes deben entrar al despacho del juez de las preferentes por el portal que linda con la terraza de la cafetería, pasar por la entreplanta, donde hay una asesoría, y cruzar un pasillo con media docena de puertas de negocios hasta dar, al fondo, con la del tribunal. Ayer, aún seguía colgado el cartel de «Se alquila».

El portavoz sindical de CC.OO.-Xustiza, Pablo Valeiras, visitó ayer las obras de acondicionamiento del local y las vio adecuadas para acoger a los seis funcionarios, el secretario judicial y la magistrada Tania Rodríguez Lozano, que viene en comisión de servicios desde el juzgado número 2 de Tui. Los trabajos de adecentamiento y amueblado avanzan rápido y todo apunta a que el lunes el tribunal abrirá sus puertas.

Plantilla «insuficiente»

Valeiras considera que la plantilla es «insuficiente» y habría sido necesario contratar a un gestor y un tramitador más, hasta alcanzar los 8 funcionarios, que es lo normal en un juzgado. «Consideramos la medida imprescible pero no la aplaudimos, tuvo que ser tomada por el Poder Judicial porque el Gobierno no lo hacía y para intentar cubrir las carencias. Estamos hablando de un escandaloso volumen de miles de casos para los que hay que darles rapidez en la atención», dijo.

La jurisdicción del tribunal abarcará Vigo y no está claro si todo el sur de Galicia. La realidad, según Valeiras, es que Cangas, Cambados y Pontevedra han recibido «numerosas» demandas de preferentes en julio.

En Vigo hay presentados 400 escritos de preferentistas que han entablado un procedimiento ordinario para reclamar las cantidades al banco que les colocó productos de alto riesgo. Un procurador reconocía en junio que solo su despacho prepara 800 demandas.

Según algunas previsiones, Vigo podrían llegar a tramitar 5.000 demandas en los próximos meses, una vez que finalizó el período de arbitraje y se aprobó la tramitación de estos litigios por Internet.

Los dos edificios judiciales agotaron su última superficie libre hace dos años, cuando el juzgado de Primera Instancia número 14 ocupó los antiguos calabozos del sótano y el Mercantil usó el ático. El futuro traslado del Registro Civil y de la oficina de Notificaciones y Embargos al Casco Vello generará espacio para uno o dos juzgados.

«Lo que ha pasado con este juzgado de preferentes demuestra lo necesario que es construir la Ciudad de la Justicia», advierte Valeiras.

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