Vitrasa compensará la congelación del billete con recortes en el servicio que ofrece
VIGO
El Concello ya estudia el plan de la empresa, que afecta sobre todo a la primera y última hora del día
28 nov 2013 . Actualizado a las 12:08 h.La congelación del billete del autobús urbano y la progresiva pérdida de viajeros se compensará con ajustes en las líneas y menos frecuencias a determinadas horas. El plan de reestructuración ya ha sido presentado por la empresa concesionaria del transporte público, Vitrasa, al Concello para que reciba el visto bueno del gobierno municipal antes de ponerlo en marcha. A los que no se ha presentado oficialmente es a los trabajadores, quienes permanecen a la espera de conocer todos los detalles y suponen que la reforma se haga efectiva el próximo año.
En principio, y hasta donde conocen los empleados, la idea es afrontar más recortes durante los fines de semana, sobre todo a primera y a última hora, cuando el servicio es más deficitario y apenas viajan tres personas por vehículo. La reestructuración en los días laborables también se centraría en esos mismos horarios, aunque, en general, supondría menos kilómetros y horas de servicio.
Según cálculos de los trabajadores, si en un día laborable se registran unos 70.000 usuarios, el fin de semana pueden oscilar entre 5.000 y 8.000. El único servicio que logra más pasajeros los domingos es el que presta el llamado bus oruga, que recoge a los viajeros en la estación de tren de Guixar, la mayoría estudiantes. Se trata de la línea 5 que desde García Barbón se desvía al Areal para retornar de nuevo a la misma calle.
Otro aspecto que contempla el plan es evitar la coincidencia de líneas a la misma hora y en las mismas paradas, como sucede en la actualidad. No es de extrañar la imagen de cuatro autobuses seguidos en el mismo punto originando el consiguiente atasco.
Según explican fuentes del comité de empresa, otra de las cosas que se pretenden con la reforma es que los viajeros procedentes del extrarradio hagan transbordo en puntos como la plaza de América o la de España. Ponen en duda la eficacia de la medida, teniendo en cuenta que en estas líneas viaja mucha gente mayor a la que ya supone un engorro subir al autobús. Entienden que si se reduce el horario de última hora, sería conveniente adelantar el servicio nocturno para evitar que quede desatendido.
En el caso del servicio que Vitrasa presta a Citroën, ya se ha reducido la frecuencia e incluso hay días en los que se suspende en función de la actividad de la compañía. De hecho, el autobús que circulaba por el interior del recinto ya se suspendió a petición de la empresa.
La menor actividad laboral en el entorno vigués como consecuencia de la crisis no ha pasado desapercibida para el transporte público, que ha visto descender de forma sustancial tanto los viajeros como los beneficios. El convenio que mantiene con el Concello le permite compensar las pérdidas.
Los trabajadores de Vitrasa no creen que la reestructuración prevista por la empresa afecte a la plantilla fija. Como mucho, dicen, podría suponer alguna hora extra menos.
El convenio colectivo de la compañía fue renovado recientemente, lo que al menos garantiza un año de paz social a la concesionaria del transporte público.