Los activistas antidesahucios no acudieron ayer a la reunión que habían concertado con la portavoz nacionalista. Iolanda Veloso y la plataforma habían quedado de verse a las cinco y media de la tarde en la oficina del BNG en el Concello, pero dejaron plantada a Iolanda Veloso sin explicación alguna.
El objetivo del encuentro era analizar la decisión de PSOE y PP de vender los 40 pisos municipales de Rosalía de Castro, una medida defendida por el gobierno socialista y la oposición popular a la que solo se ha opuesto el BNG.
Los nacionalistas consideran que un parque de 40 viviendas en perfecto estado es un patrimonio para el Concello, que puede utilizarlas para resolver situaciones de familias en crisis. De hecho, el año pasado el gobierno de Caballero convocó un concurso para adjudicar casi de manera gratuita nueve viviendas en Navia. Dos de ellas quedaron vacantes y ahora se ha convocado otro para personas en situación de exclusión económica y que tengan problemas de discapacidad.
En el caso de Navia, el Concello también es titular de una treintena de viviendas en un edificio, todas ellas en el mismo portal, y las adjudicó en alquileres baratos de entre 100 y 200 euros. En el caso de este barrio nunca se planteó la venta de las viviendas como una salida para el Concello, al contrario de lo ocurrido en Rosalía.
La reunión de Veloso con la Plataforma Antidesahucios fue objeto de comentarios por parte del alcalde antes de la hora prevista para su celebración. «Quien se hace cargo de los desahucios en Vigo es el Concello. Hemos utilizado para ello varios pisos en Navia y ahora, con los nuevos presupuestos, vamos a financiar el alquiler de 150 viviendas a otras tantas familias que lo necesitan de manera imperiosa», explicó Caballero.
Aludía a la existencia de una partida de 700.000 euros en el borrador de presupuestos para este año en el marco de las ayudas sociales. El año pasado entregó cerca de 2,5 millones de euros por medio de un cheque social y en esta ocasión ha dividido el dinero en tres capítulos y lo entregará, no necesariamente a las mismas familias, para alquileres, alimentos y pago de electricidad y calefacción.
Como el BNG rechaza el proyecto de presupuestos que han negociado PSOE y PP, Caballero criticó ayer a los nacionalistas asegurando que «se están equivocando». «Es un presupuesto social y progresista y le pido una vez más a los concejales del BNG que no sean rehenes de las disputas del nacionalismo. Les pido que recapaciten y colaboren con la ciudad como hacían antes». Aludía al pacto PSOE-BNG que ha gobernado Vigo desde 2007, año en el que llegó a la alcaldía.