El nuevo hospital hará en un camión sus primeras resonancias

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

JORGE PÉREZ

Al Sergas no le dará tiempo a instalar la máquina en el interior

15 jul 2015 . Actualizado a las 18:59 h.

Los retrasos en la compra del equipamiento para el nuevo hospital de Vigo impedirán que el centro sanitario pueda empezar su actividad haciendo resonancias magnéticas dentro de sus instalaciones. Tendrá que estar al menos dos meses realizando esas pruebas radiológicas en la resonancia móvil de la empresa pública Galaria, un camión que da servicio a los hospitales comarcales de Galicia porque no tienen estos aparatos. Ese camión se instalará también, de forma provisional, en el hospital más moderno de la comunidad.

Un doble problema ha conducido a esta situación. Por un lado, están las impugnaciones a la compra del equipamiento necesario para el nuevo hospital. Prácticamente todos los expedientes han sido recurridos ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales y la mayoría siguen bloqueados. La compra de la nueva resonancia del Chuvi se incluye dentro de un contrato de alta tecnología para toda Galicia. Fuentes sanitarias dan por hecho que el recurso está a punto de resolverse de forma favorable al Sergas. Pero, de entrada, ha estado varios meses paralizado.

La segunda parte es que la adjudicación del contrato no lo arregla todo. Después la empresa tiene unos dos meses para suministrarla y, además, la instalación de una resonancia es un proceso complejo, que obliga a realizar una obra civil en el interior del propio hospital. Así que, aunque esta misma semana se levante el recurso contra la compra, como puede ocurrir, no habrá tiempo para que pueda instalarse en el tiempo necesario.

Porque debe estar operativa el 24 de agosto. Ese será el día en que la puesta en marcha del nuevo hospital entre en una fase crítica, porque será cuando empiece a ingresar pacientes. De modo que debe disponer de una resonancia, la prueba de diagnóstico por imagen más avanzada.

Fuentes sanitarias indican que al menos hasta octubre no podrá estar disponible la nueva resonancia, la más avanzada de Galicia, con 1,5 teslas. Por eso, la gerencia del área sanitaria, que ha tenido que trazar planes B y planes C para todo lo que tiene que ver con el equipamiento ante la ola de recursos, ha decidido echar mano de la resonancia móvil de Galaria. Esta empresa pública envía su camión periódicamente a los hospitales comarcales gallegos. Las citas se concentran en los días en que la unidad móvil está allí. Solo en el 2013 hizo 11.709 pruebas. Ahora se instalará en el Hospital Álvaro Cunqueiro, probablemente junto a la entrada principal del edificio.

Además, aunque se van a comprar nuevos tac, también habrá que trasladar algún escáner del Xeral.

Por lo demás, los plazos se están cumpliendo. Pero ni la apertura del Hospital Álvaro Cunqueiro, desde el 29 de junio, ha frenado la polémica política. Ayer concejales del BNG y la Marea anunciaron mociones en los plenos del área de Vigo contra «os recortes» en el hospital.

El juzgado valida cuatro jefaturas de servicio denunciadas

El juzgado contencioso-administrativo de Vigo ha desestimado un recurso interpuesto por el sindicato Comisiones Obreras en contra del procedimiento para seleccionar cuatro jefaturas de servicio. Se trata de las jefaturas de Angiología y Cirugía Vascular, Dermatología, Medicina Interna y Psiquiatría. CC.OO. había denunciado al Sergas al considerar que las bases vulneraban el principio de igualdad, que no fijaban un tiempo máximo de exposición del proyecto y que se reservaba al gerente del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) la potestad de cesar cuando quisiese a los jefes. El juez Antonio Martínez Quintanar considera que las bases del Sergas se adecúan a la normativa.

Aquellas jefaturas de servicio fueron resueltas el año pasado salvo la de Medicina Interna, que quedó desierta porque la comisión de evaluación entendió que ninguno de los tres aspirantes era apto.